Dos empresarios desbancan a la familia Fiter de la gestión de Urbas
La familia Fiter tendrá que abandonar el control de la gestión de la inmobiliaria Urbas en favor de dos empresarios de Castilla-La Mancha que se han marcado como objetivo hacerse con cerca del 25% del capital de la compañía.
Ramón Fiter, el fundador de la inmobiliaria Urbas y antiguo socio de Javier de la Rosa, será apartado definitivamente de la gestión de la compañía. Su participación en la empresa, que ascendía al 25%, se verá reducida a un 8%, tras las sucesivas ventas accionariales en Bolsa realizadas a lo largo de este verano y al cierre de la ampliación de capital que tiene en marcha la empresa.
Los nuevos gestores son empresarios castellano-manchegos, propietarios de la poseen una pequeña promotora, Guadahermosa. Su intención es reflotar la empresa, sumida en una grave crisis desde hace varios años, y desvincularse completamente de la etapa anterior.
La ampliación que se lanzó para restablecer el equilibrio patrimonial de la sociedad, se ha dividido en varios tramos. Una primera parte, por importe de 20,90 millones, se llevará a cabo mediante aportaciones dinerarias y se dirigirá a los accionistas que quieran ejercer su derecho de adquisición preferente.
Aportación de terrenos
El tramo de aportación no dineraria, de 8,10 millones, se ha destinado a Guadahermosa, que ha aportado unos terrenos en Guadalajara para que Urbas pueda empezar 'de inmediato' a tener actividad. En ese solar está prevista la construcción de 181 viviendas.
El resto del importe de la ampliación, de 818.020 euros, se ha destinado a compensar los créditos que Urbas mantiene con las sociedades Fidelca Telecom, de la familia Fiter, y Guadahermosa, de los nuevos gestores, estos dos últimos tramos ya se han cerrado y sólo resta por materializar el primero.
Los propietarios de Guadahermosa, sociedad que posee ya una pequeña participación en el capital de Urbas, explican que tras el cierre de toda la operación de refinanciación su participación en el grupo inmobiliario se situará por debajo del 25%.
En el consejo sólo quedan ahora los dos hijos del fundador, José Ramón y David, que pronto se apartarán también de la gestión diaria de la compañía, según fuentes cercanas a ésta.
El presidente de la inmobiliaria será uno de los socios de Guadahermosa, Javier de Irizar, ex alcalde de Guadalajara y ex presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha.
El compromiso al que han llegado los nuevos gestores con los accionistas en la última junta general es obtener un beneficio de tres millones de euros al cierre de este ejercicio, lo cual es toda una proeza dada la situación en la que está sumida Urbas.
En el último semestre, la inmobiliaria, que mantiene sólo dos empleados en sus oficinas en la calle de Princesa, en Madrid, aumentó un 66% sus pérdidas, hasta un total de 324.000 euros.
Ramón Fiter, bajo la sombra del 'caso Grand Tibidabo'
Ramón Fiter ejerció su actividad empresarial en los años ochenta y noventa, cuando desde el holding Fitinvest comenzó a hacer negocios con su amigo personal Javier de la Rosa. Implicado en el caso Grand Tibidabo, en 1994 fue condenado a dos meses de prisión como cooperador necesario con De la Rosa en los delitos de apropiación indebida, estafa y falsedad en documento mercantil.Según las investigaciones, Fiter recibió de De la Rosa un crédito de 16 millones de euros para adquirir la inmobiliaria Urbas. Una vez fuera de prisión, Fiter siguió teniendo problemas con la justicia. La cotización de la compañía estuvo suspendida entre 1997 y 1998, después de que el auditor se reservara su opinión sobre las cuentas. En 1998, un juzgado madrileño volvió a condenar al empresario como autor de cinco delitos contra la Hacienda pública por hechos cometidos en 1990 y 1991.Sin embargo, Fiter se libró de la cárcel por un indulto firmado por el rey Juan Carlos en el año 2000. Hoy, el septuagenario Fiter está apartado de toda actividad empresarial y mantiene sólo el 8% de Urbas.