Los bancos, sin potestad en el fraude por pérdida de tarjetas

El Servicio de Reclamaciones del Banco de España se ha pronunciado sobre la responsabilidad en los casos de uso fraudulento de tarjetas de crédito debido a su pérdida o robo. Según el regulador, la banca no debe ser quien decida si los clientes han actuado con negligencia. Las autoridades judiciales son las que tienen que decidir en caso de duda sobre el uso que el titular haga de la tarjeta.

Las entidades están obligadas a cubrir los gastos por retiradas de dinero irregulares, salvo si su utilización ha tenido lugar por negligencia grave del dueño de la tarjeta o con su conocimiento y siempre que éste haya denunciado con rapidez su pérdida. Si la sustracción del dinero se ha producido antes de la denuncia del extravío o robo, el cliente deberá pagar un máximo de 150 euros.

El banco central opina que 'en ocasiones' las entidades intentan 'eludir' su responsabilidad, 'calificando la actuación de los titulares de negligente'. En estos casos, el banco trata de responsabilizar al cliente argumentando que no actuó correctamente.