Desplome en Bolsa de Dell al frenarse sus ventas
Dell cayó ayer un 7,8% en Bolsa al registrar unas ventas de 13.400 millones en el segundo trimestre. Todas las previsiones apuntaban a un crecimiento mayor del 15%, el peor resultado obtenido por Dell en los últimos tres años. Kevin Rollins, director ejecutivo de la compañía, ha achacado esta desaceleración a una política de precios demasiado agresiva.
La Bolsa no ha perdonado a Dell, que ayer veía caer sus acciones un 7,8%. Por primera vez en sus 10 años de historia Dell ha admitido errores estratégicos cuando el mundo entero alaba su modelo de venta directa que le ha llevado a ser el primer fabricante de PC a nivel mundial. Sin embargo, las ventas del segundo trimestre no han respondido a las expectativas de los analistas, que las situaban en 13.700 millones, ni a sus propias previsiones, que llegaban hasta los 13.800 millones.
'Hemos sido más agresivos de lo que necesitábamos ser', ha reconocido Kevin Rollins, que achaca esta desaceleración de las ventas a una política de recorte de precios y a un descenso inesperado de los pedidos de la administración pública de EE UU.
A pesar de todo, la compañía ha logrado un ingresos netos de 1.020 millones de dólares, un 28% más que los beneficios registrados el año anterior. Las ventas de PC se han resentido especialmente, pero sin embargo los sistemas de almacenamiento, los dispositivos móviles, las impresoras y los servicios han hecho que se compensen los beneficios.
Los ordenadores siguen siendo el principal negocio de Dell, aunque sus ventas sólo han aumentado un 2%, a pesar de haber vendido un total de 9,1 millones de máquinas. Las ventas de los portátiles, cuyo margen de beneficios es mucho mayor que el de los sistemas de sobremesa, también han descendido del 22% del primer trimestre al 20% en el segundo.
Durante la presentación de resultados, Rollins dijo claramente que su error había sido el no aumentar entre 10 y 15 dólares el precio de cada ordenador. Esta confesión ha llamado poderosamente la atención del mercado ya que Dell ha sido la empresa que mejor ha sabido ajustar sus precios para mantenerse en la fabricación de PC, una actividad que todas las marcas han externalizado a fabricantes asiáticos.
La estrategia de bajar precios para ganar cuota de mercado está lastrando la rentabilidad de Dell, que ha perdido un 6% de su valor en lo que va de año. Sin embargo, la compañía ha reforzado su liderazgo mundial con una cuota de un 19%, un punto más que el año pasado.