Greenspan sube los tipos al 3,5%
La Reserva Federal estadounidense (Fed) cumplió ayer con las previsiones del mercado y aumentó sus tipos de interés en un cuarto de punto, hasta el 3,5%. Se trata de la décima subida consecutiva desde junio de 2004, cuando las tasas estaban en el mínimo histórico del 1%. La Reserva Federal advierte que continuará elevando el precio del dinero, pero 'a un ritmo mesurado'.
En el comunicado emitido tras la reunión, la Fed señaló que la inflación subyacente ha sido 'relativamente baja' en los últimos meses con tendencia a continuar estable a largo plazo pero, no obstante, las presiones sobre los precios se han mantenido 'elevadas'. El comunicado apunta que la Reserva Federal continuará elevando el precio del dinero en el futuro, aunque a un ritmo 'mesurado'.
La decisión de ayer muestra que la Fed intenta evitar el riesgo de inflación mientras la economía estadounidense acelera su ritmo de crecimiento. En las últimas semanas todo han sido buenas noticias para la coyuntura. El consumo privado creció un 0,8% en julio y las ventas minoristas mejoraron un 1,7% en el mes anterior impulsadas, sobre todo, por el sector automovilístico. Al mismo tiempo, las empresas de EE UU mejoraron sus ganancias en el segundo trimestre en un 10%, según los datos de las compañías que ya han presentado resultados. 'La línea seguida por la política monetaria está proporcionando soporte a la actividad económica', dijo ayer la Fed. Se espera que la primera economía del mundo crezca este trimestre un 4,1%.
Los expertos creen que los tipos de interés en EE UU podrían alcanzar el 4% o el 4,25% antes de que Alan Greenspan, presidente de la Fed, deje su cargo a finales de enero del próximo año. Opinan que el alza del petróleo, que el lunes superó los 64 dólares por barril en Nueva York, y de los salarios son razones suficientes para que la Fed mantenga la tendencia alcista del precio del dinero.
La mejora de los sueldos es positiva para los trabajadores estadounidenses y para el gasto de los consumidores, uno de los pilares de la economía de EE UU, pero, a la vez, suponen un riesgo para la inflación. El salario medio por hora registró en julio la mayor subida del año, con un aumento mensual del 0,4%, hasta los 16,13 dólares, y en ese mes se crearon 207.000 nuevos empleos.
Mientras, la productividad se ha desacelerado y entre abril y junio creció sólo un 2,2%, la tasa más baja en nueve meses. 'La combinación de un crecimiento rápido del empleo y la bajada en la productividad llevará a más incrementos del precio del dinero antes de que acabe año', dijo Irwin Kellner, economista jefe de Norht Fork Bank y profesor de Economía en la Universidad de Hofstra.
En su intervención ante la Cámara de los Representantes a finales de julio, Greenspan advirtió de que la presión al alza de los salarios, que hasta ahora no crecían, podría provocar una subida de los precios superior a lo previsto y consideró que ello es una de las amenazas más importantes para la economía estadounidense. En junio, la tasa de inflación interanual de EE UU se mantuvo sin cambios en el 2,5%, mientras que la subyacente subió un 0,1% hasta el 2% interanual. Otro de los riesgos, según el presidente de la Fed, es el precio de la vivienda, que en muchas zonas de EE UU está alcanzando cotas insostenibles.
Mientras EE UU prosigue con el endurecimiento de su política monetaria, la eurozona mantiene los tipos en el 2% y Reino Unido ha comenzado a bajarlos por temor al estancamiento económico.