Unipol asegura que la compra de la BNL no es política
El presidente de Unipol, Giovanni Consorte, afirma que el precio ofrecido por la BNL, de 2,7 euros por acción, es el adecuado. Unipol prevé sinergias de 500 millones de euros con BNL. Consorte asegura que en la decisión de lanzar una contraopa que rivalizase con la del BBVA no ha tenido nada que ver la política.
Consorte asegura que la operación diseñada por Unipol para hacerse con la Banca Nazionale del Lavoro (BNL) mediante una contraopa obligatoria, pendiente de autorización, es una operación de mercado, 'en la que no tiene nada que ver la política'.
En dos entrevistas publicadas ayer en el diario económico Il Sole 24 Ore y el de información general L'Unita, el presidente de la aseguradora italiana afirma que la compra, mediante un entramado de pactos, de la BNL, a la que también aspira el español BBVA, permitirá a su compañía 'ganar de golpe seis u ocho años'.
'En esa lógica Unipol se ha aliado con tres bancos mundiales (el japonés Nomura, el suizo Credit Suisse y la alemana Deutsche Bank), cuatro entidades italianas, cuatro grandes cooperativas y alguno socios privados'.
Giovanni Consorte sostiene que Unipol cuenta con un plan de seguros y bancario que, 'si podemos llevarlo a cabo, nos permitirá convertirnos en uno de los primeros grupos financieros de Italia, capaz de contar en Europa'. Tras señalar que la compañía boloñesa ha respetado la normativa vigente para las ofertas obligatorias, al superar el 30% con la compra a 2,70 euros por acción del 27,4% en manos del llamado contrapacto, añade que 'incluso hemos ofrecido algo más para evitar instrumentalizaciones y tensiones'.
Mientras, la Fiscalía romana ha pedido al Banco de Italia documentación sobre la aseguradora Unipol, que ha anunciado una contraopa obligatoria, pendiente de autorización, sobre la BNL.
La decisión, según aseguraba ayer la prensa italiana, ha partido de los fiscales Perla Lori y Achille Toro, que investigan la escalada financiera producida en la BNL en los últimos meses.
El sumario, abierto tras la denuncia presentada por el BBVA, es, de momento, contra 'desconocidos'. El denominado en Italia agiotaje, que es la manipulación del mercado y obstáculos a los organismos de vigilancia, son los delitos que presupone la Fiscalía de Roma.
Ya el pasado 9 de junio la Fiscalía interrogó a varios directivos del Banco de Italia, siempre en relación con el papel de control del organismo regulador en el proceso de compra de las entidades italianas BNL y Antonveneta por parte de la española BBVA y de la holandesa ABN Amro.
Según fuentes jurídicas, los fiscales Achille Toro y Perla Lori tomaron declaración al director central del área de vigilancia crediticia y financiera del Banco de Italia, Francesco Frasca, y a otros dos directivos.
En el caso de la BNL, la Justicia investiga si existió una especulación abusiva y una manipulación del precio de los títulos del banco romano, después de que el BBVA denunciara maniobras poco transparentes para impedir la opa presentada para hacerse con la BNL.
En aquellos días, el papel del Banco de Italia y, más concretamente, de su gobernador, Antonio Fazio, en las operaciones de compra de BNL y Antonveneta fue muy criticado fuera como dentro de Italia, por su beligerancia con las entidades extranjeras.
Prodi critica la actuación de Fazio
El líder de la oposición italiana, Romano Prodi, criticó ayer al Gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, por no ejercer de árbitro en los intentos de compra de bancos nacionales por entidades extranjeras, como el BBVA o el holandés ABN Amro. 'Escaladas y contraescaladas son normales en el capitalismo. No es este el problema, pero se han formado bloques políticos en defensa de los contendientes y los reguladores, comenzando por el Banco de Italia, han dado la impresión en algunos casos de no ser árbitros, sino parte en el juego', afirma Prodi en una entrevista que publica el periódico Corriere della Sera. En ella el ex presidente de la Comisión Europea señala que 'todos estos eventos ocupan primeras páginas de la prensa internacional y transmiten un mensaje de debilidad de las reglas del mercado financiero italiano'. Por su parte, parte de los miembros del denominado contrapacto, entre ellos, Stefano Ricucci, tienen previsto adquirir una participación en Monti dei Paschi, según lo publicado en la prensa italiana. Los títulos de la entidad cerraron ayer sumando un 3,1%.