Arte y diseño en el hotel Puerta América de Madrid
Descansar sumergido en un mundo de sensaciones es lo que promete a sus huéspedes el hotel Puerta América, que reunió a 19 de los mejores estudios de arquitectura y diseño del mundo para su construcción, con una inversión estimada de 75 millones de euros.
Gestionado por el grupo español Silken y ubicado al pie de la A-2, a seis kilómetros del aeropuerto de Barajas, el hotel ocupa una superficie superior a los 34.000 metros cuadrados y cuenta con 342 habitaciones. Ofrece servicios de spa, gimnasio, piscina y babysitting.
'La inauguración de este hotel representa un sueño hecho realidad. Y forma parte de nuestro concepto general de desarrollar una nueva hostelería con personalidad propia', señaló ayer Joan Valls, director general de Silken, durante la presentación en sociedad del hotel de lujo 5 estrellas.
Jean Nouvel, Richard Glukman, Victorio & Lucchino y Zaha Hadid son algunos de los arquitectos y diseñadores de trece nacionalidades diferentes implicados en el proyecto general de Puerta América.
Cada una de las doce plantas presenta la misma distribución: un vestíbulo central y un pasillo que organiza las habitaciones a ambos lados. Pero cada una propone un concepto diferente de diseño, que se expande a las habitaciones. Así, mientras que en la cuarta planta predominan el acero inoxidable y la geometría, la primera produce un efecto glaciar, y en la segunda predominan la piedra, el cuero, la madera y el vidrio, en tonos claros.
El restaurante ha sido diseñado por Christan Liaigre; y ofrece platos típicos de Galicia, Cataluña y Andalucía.
El garaje, con capacidad para 644 coches, es otro espacio del hotel que sorprende por su diseño. Allí, Teresa Sapey intentó romper con lo convencional y monótono de prácticamente todas los garajes, apelando al uso de colores y grafismos que, a su vez, cumplen una función, como el rojo, indicando la salida.
El precio de una habitación sencilla es de 300 euros; una habitación junior suite sale por 560; y la suite en temporada alta llega a costar 1.500 euros.