La pasión por los caballos de Stubbs
Los visitantes de la exhibición George Stubbs y el caballo que inaugura hoy la National Gallery de Londres podrán asombrarse ante el retrato de tamaño real de Whistlejacket, un impresionante animal de color canela y expresiva mirada que alza amenazante sus patas delanteras mostrando toda su potencia muscular.
Whistlejacket es el protagonista más espectacular de esta exposición, que permanecerá abierta hasta el 25 de septiembre y que tiene como tema central la pasión del pintor británico George Stubbs (1724-1806) por los caballos, a los que retrató con verdadera obsesión y de los que realizó minuciosos estudios anatómicos. El museo ha logrado reunir un total de 35 pinturas y 32 dibujos de estudios anatómicos de caballos realizados por el artista.
Stubbs pasó casi dos años diseccionando caballos y dibujando desde distintas posiciones sus músculos y esqueletos en una granja en Horkstow.
Pero Stubss fue mucho más que un brillante anatomista y era capaz no sólo de capturar con perfecto detalle cada parte del cuerpo de estos animales sino retratar el carácter de cada caballo, su mansedumbre, su valentía o incluso su arrogancia.
El dueño de Whistlejacket, el poderoso marqués de Rockingham, fue uno de los mecenas de Stubbs y desempeñó un importante papel en el éxito que acabaría cosechando el pintor en la alta sociedad londinense. El príncipe de Gales fue otro de sus benefactores y le encargó 14 cuadros inspirados en los deportes ecuestres. Algunos de ellos se encuentran en la muestra, como el retrato a caballo con fondo de paisaje neoclásico de Lady Lane, la esposa del entrenador de caballos de carreras del príncipe.
Stubbs es reconocido como el mejor pintor de caballos de la historia del arte europeo. La muestra explora también el entorno cultural en qué se produjeron las obras y ofrece una visión de la importancia del caballo en la cultura británica del siglo XVIII.