'La responsabilidad mejora la competitividad empresarial'
Eduardo Montes es tajante. 'Una regulación excesiva puede ser negativa'. No cree que sea necesaria una regulación en Responsabilidad Social Corporativa porque, en su opinión, ésta forma parte de los valores empresariales, y eso no se puede regular
Preside un Club en el que, además de Siemens, se encuentran ABB, Adecco, Alstom, Basf, Cepsa, Endesa, Iberdrola, MRW, La Caixa, Renfe, Telefónica Móviles, Vodafone y Unión Fenosa, entre otras. Eduardo Montes asegura tener miedo a la regulación excesiva y opina que el papel del Gobierno no debe ser el de regular, sino el de incentivar las políticas de responsabilidad corporativa.
¿De dónde partió la idea de crear el Club de Excelencia en Sostenibilidad?
Responde a una serie de inquietudes de muchos colegas de distintas compañías. Poco a poco fue formalizándose la posibilidad de crearlo y Juan (Juan Alfaro, secretario general del Club) fue el encargado de aglutinar todo. La idea nace de darnos cuenta de que existía una inquietud por ese tema, de que esa inquietud estaba enfocada en muchas empresas de forma diferente, de que todos hacíamos cosas muy buenas y algunas que no estaban tan bien y de la necesidad de compartirlas y hacer un análisis de las mejores prácticas.
¿No cree que hay muchas iniciativas en el terreno de la responsabilidad corporativa?
No hay tantas. El Club ha ido creciendo en todos los terrenos porque hemos puesto recursos. Ha crecido en socios porque es una idea muy interesante, en la que participamos los presidentes de las compañías. Por eso ha crecido hasta el punto que somos 22 empresas y ha crecido en volumen, porque representamos aproximadamente un 18% del PIB español.
¿Cree que parte de la razón del crecimiento del Club se debe a la implicación de los altos directivos?
Sin duda. Lo que diferencia a este club es la involucración personal, primero mía, y eso hace que mis colegas también se involucren. Es la única forma.
¿Por qué es importante para la empresa la responsabilidad corporativa?
Porque es una ventaja competitiva. En el futuro va a ser una condición necesaria para mejorar de una manera fundamental nuestra posición. El fallar en algún tema de responsabilidad corporativa ha llevado a grandes fracasos empresariales. Si fallas en la salud económico financiera es evidente, pero si lo haces en tu política medioambiental o social, también te puedes cargar la compañía. Por otra parte, la responsabilidad corporativa te ayuda a mejorar tu reputación, que es la aceptación que tú tienes ante la sociedad y evidentemente eso es una ventaja competitiva.
¿Y qué es realmente la responsabilidad corporativa?
Las cosas son complicadas de definir, pero es aquello que te lleva a conseguir que tu compañía dé buenos resultados para tus accionistas siendo respetuoso con el medio ambiente y con su entorno. Lo resumiría diciendo que consiste en ser un buen ciudadano de tu entorno y para eso tienes que generar valor económico, medioambiental y social. Esta generación triple de valor es la que redunda en una responsabilidad corporativa.
¿Los ciudadanos demandan a las empresas esta responsabilidad o son las empresas las que se adelantan al ver que es una forma de ser más competitivas?
Los ciudadanos, cada vez más, demandan que generen puestos de trabajo y riqueza, aunque no sea una demanda directa.
¿Cuáles son los planes de crecimiento del Club, que empezó con 16 empresas y ahora tiene 22?
No tenemos ningún plan. No tenemos ningún interés especial en que entren más socios. Más bien al contrario, nuestro club es bastante exigente a la hora de incorporar nuevas compañías. Hay compañías que piden su ingreso, se les analiza y se les dice que no.
¿Qué ventajas aporta a una empresa estar dentro del Club?
Es evidente que aporta prestigio. Sin duda. Yo soy presidente de este Club, pero sobre todo soy presidente de Siemens y si Siemens está ahí es porque me aporta un intercambio de experiencias muy importante con otras compañías, que permite mejorar en aquello que hay que mejorar, me permite participar en foros que de otra forma sería más complicado. Y mejora la relación corporativa. Pero no aporta mucho más.
El miedo a la sobrerregulación de la transparencia
Para el presidente de Siemens la voluntariedad en los temas de buen gobierno es casi sagrada. 'Es lo que hace que las empresas lo puedan utilizar como ventaja competitiva. Si se aplican principios de buen gobierno en una empresa no cotizada, la imagen será la de una empresa más sostenible. Pero no soy partidario de la sobrerregulación', recalca. Eduardo Montes asegura que a pesar de que Siemens no cotiza en España, sí se aplican medidas de buen gobierno, 'aunque al no ser cotizados hay temas que no son de interés para nadie y que por ley no tenemos que anunciar'.Montes también se muestra contrario a la posibilidad de que la subcomisión parlamentaria acabe decidiendo la elaboración de una ley que regule la responsabilidad social corporativa.'A mí me da miedo. Siempre he temido el intervencionismo estatal en compañías privadas. Veo complicado que el Gobierno me diga cosas como, por ejemplo, la forma en la que tengo yo que gestionar mi consejo de administración, porque esta compañía es propiedad privada. Soy muy reticente a que a un gestor de una compañía le obliguen a gestionar de una u otra forma. Y desde luego, si yo le doy algo a una ONG determinada eso es una cosa que tiene que quedar entre la ONG y yo. ¿Quién me lo va a auditar? Estoy en contra de esto. Hay cosas que se tienen que regular por ley, que son las relacionadas con la protección de la ciudadanía. Pero en el resto no', afirma de forma contundente.