Primera antológica de Corot en España
El último de los clásicos, pionero de los modernos. Así ve a Jean-Baptiste Camille Corot (1796-1875) Vincent Pomarède, conservador jefe del Departamento de Pintura del Museo del Louvre y comisario de la exposición Corot. Naturaleza, emoción, recuerdo, que podrá verse en el Museo Thyssen-Bornemisza desde hoy hasta el 11 de septiembre.
La naturaleza en la que se inspiró para pintar sus paisajes, las emociones que Corot supo transmitir en sus composiciones y los recuerdos que esos paisajes evocan al artista, son las tres claves de la primera muestra monográfica dedicada al pintor francés en España.
La exposición revisa en 81 obras la totalidad de la carrera artística de uno de los pintores más importantes del XIX, cuya obra supera la herencia neoclásica, el realismo y el romanticismo imperantes en su época, para convertirse en un auténtico precursor de las grandes corrientes pictóricas del siglo XX, entre ellas la abstracción -Kandinsky se consideraba en deuda con Corot, según Vincent Pomarède- o el cubismo.
El arte moderno trajo consigo una actitud de rechazo contra el pasado próximo de la que fueron víctimas muchos artistas, recordó Tomàs Llorens, conservador jefe del Museo Thyssen-Bornemisza. Corot fue uno de los pocos pintores del siglo XIX que se salvaron de ese rechazo, pero tuvo que pagar un precio. Su pintura fue apreciada sólo en la medida en que se veía en él a un precursor del Impresionismo.
La exposición pone el acento en un aspecto que la crítica modernista no supo entender: Corot fue un pintor de paisaje, pero el paisaje no como un hecho puramente visual, sino una realidad más compleja, en la que pesaban también otros factores. La muestra plantea un recorrido completo de más de cincuenta años de creación, organizado en ocho apartados: Primeros años, Italia, Territorios de Francia, Del paisaje histórico al lírico, Realismos, Ville-d' Avray, Figuras y Souvenirs.
El Thyssen reúne varias de sus obras maestras, entre ellas Recuerdo de Montfontaine, icono del Museo del Louvre y uno de sus primeros paisajes animado mediante el recurso de efectos lumínicos y de una gama cromática significativa de lo que se denomina brumas plateadas de Corot.
Tras su presentación en Madrid, la exposición, en la que colabora el Consorcio Turístico de Madrid, podrá verse en el Palazzo dei Diamanti de Ferrara.