El BCE no descarta bajar los tipos en la zona euro para animar el crecimiento
El economista jefe del Banco Central Europeo, Otmar Issing, ha declarado hoy que el organismo no descarta una posible bajada de los tipos de interés en la eurozona. Aunque los riesgos de inflación son ahora menores que a finales del pasado año, las perspectivas de crecimiento han empeorado, y son varios los países que se quejan de que el nivel actual no estimula sus economías.
A la hora de acariciar esta idea, el organismo tiene sin duda en cuenta el débil pulso económico de algunos países de la zona euro, sobre todo de Italia y Portugal, que se encuentran en recesión técnica. El crecimiento del conjunto de la zona no se comporta mucho mejor, y apenas llegará al 2% en 2006, pese a que el dinero lleva en el precio mínimo del 2% desde hace ya dos años.
Una sola moneda, pero distintos ritmos de crecimiento
Estos problemas se sumen a la crisis desatada por la sucesión de negativas a ratificar el Tratado que establece una constitución Europea. Los sucesivos noes de Francia y Alemania han hecho público un debate que existía pero que no se explicitaba, el de si es eficiente una unión monetaria tan rígida en un contexto de grandes disparidades, con países que crecen menos de un 1%, y países que crecen por encima del 3% (como España).
Y aunque el BCE explica que esta brecha es normal, y que también existe en Estados Unidos, con enormes desequilibrios territoriales, son ya muchas las voces que responden afirmando que la zona euro no tiene mecanismos lo suficientemente flexibles como para responder a ellos, ya que no dispone ni de la movilidad laboral ni de las políticas de redistribución de Estados Unidos.
Abandonar el euro es impensable
La discusión en torno a la oportunidad de la moneda única, aunque se rebaja de tono, está en todo caso lejos de apagarse. Hoy el ministro de Economía y Hacienda español, Pedro Solbes, que fue comisario europeo con el anterior ejecutivo comunitario, ha respondido con dureza a las declaraciones de Roberto Maroni, ministro italiano de la antieuropeísta Liga Norte, en las que pedía un referéndum para que Italia vuelva a la lira.
Solbes ha afirmado así que el de Maroni ¢es un comentario de alguien que no conoce de lo que se está hablando cuando hablamos de la puesta en marcha del euro, de lo que ha supuesto y del compromiso permanente que supone¢, y ha cerrado la discusión calificándolas de ¢extravagancia¢.