UGT rechaza una reforma en profundidad de las pensiones
El sindicato UGT piensa mantener el pulso al Gobierno en la reforma de las pensiones. La central acordó este viernes en su 39 Congreso Confederal que exigirá el mantenimiento del actual método de cálculo de la pensión de jubilación, con lo que parte de una posición cerrada en la reforma de la Seguridad Social.
El Gobierno parece que no ha convencido al sindicato UGT para sentarse a negociar una reforma en profundidad de la Seguridad Social que garantice la viabilidad del sistema hasta pasado el 2020.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero pidió incluso al sindicato en la inauguración el miércoles del 39 Congreso Confederal de UGT que estuviera dispuesto a hacer la reforma de la Seguridad Social que fuera necesaria.
Sin embargo, la central acordó este viernes en su Congreso que exigirá al Gobierno que mantenga el actual modelo de cálculo de la pensión, según el cual sólo se tienen en cuenta los últimos quince años cotizados para fijar la cuantía de la prestación de jubilación.
El sindicato ya rechazó en 2001 firmar con el Gobierno popular el Acuerdo de Pensiones, que sí ratificaron Comisiones Obreras y CEOE, y el motivo fundamental fue que dicho pacto dejaba abierta la posibilidad de ampliar el número de años que se tienen en cuenta para calcular la pensión, a más de los quince actuales o incluso a toda la vida laboral del trabajador. Ahora, ha quedado claro que UGT no está dispuesta a hacer una reforma en profundidad de la Seguridad Social. El responsable de UGT en esta materia, Jesús Pérez, argumentaba el viernes que 'la clave para garantizar el futuro de las pensiones es el cambio del modelo productivo y la mejora de la cualificación de los trabajadores'.
No obstante, el sindicato sí reclama algún cambio en el sistema de pensiones. Además de estar dispuestos a 'adecuar' las pensiones de viudedad, UGT exigirá al Gobierno un marco legal que regule las prejubilaciones. Propone crear un fondo dotado con impuestos y aportaciones de las empresas que abusen de las prejubilaciones, que iría destinado a financiar las cotizaciones de los prejubilados de las pymes, desde que son expulsados del mercado laboral hasta que puedan acceder a la jubilación anticipada.
Subir cotizaciones
Entre las propuestas más novedosas aprobadas el viernes del resto de las materias destaca su intención de reclamar una subida de las cuotas de formación que pagan trabajadores y empresarios.
Según su propuesta, se mantendría la actual proporción (el empresario paga la sexta parte de la cuota y el trabajador una), pero se aumentaría la cuantía de la cotización, para suplir la financiación del Fondo Social Europeo para la formación de los trabajadores que se perderá en 2007.
Además, sugieren que el actual superávit del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) se destine a mejorar las indemnizaciones de los trabajadores despedidos por empresas insolventes. En consecuencia, rechazan de plano la petición de la CEOE de destinar este superávit a rebajar la cotización al Fogasa. Y propondrán en el diálogo social, como medida contra la temporalidad, que el sindicato pueda demandar a la empresa que usa de forma fraudulenta los contratos temporales, sin que el trabajador deba personarse como denunciante, como exige ahora la ley.