La plantilla de Electrolux colapsa Logroño en la protesta por el cierre
Alrededor de medio millar de personas colapsaron ayer por la tarde las principales calles de Logroño para protestar por el posible cierre de la planta que tiene la multinacional sueca Electrolux en el municipio de Fuenmayor.
Durante la marcha, los manifestantes lanzaron insultos contra el presidente riojano, Pedro Sanz, contra la multinacional y contra la policía antidisturbios, que protegían la sede de la Delegación del Gobierno y el Palacio de Gobierno de la Comunidad. Frente a ambos edificios, los participantes en la manifestación lanzaron huevos contra sus fachadas.
Con anterioridad, los obreros de la fábrica habían cortado entre las 12 y las 13 horas y entre las 16 y las 17 horas la N-232 a su paso por la planta, lo que generó importantes retenciones de tráfico entre el centro de la localidad de Fuenmayor y Cenicero, que obligaron a desviar el tráfico por la AP-68.
Los cortes coincidieron con la segunda jornada de paros de un hora en cada uno de los turnos de trabajo de la empresa para protestar por la situación en la que ésta se encuentra.
'Nos hemos reunido con el director de la planta, Rodolfo Rivero, y nos ha dicho que ve la cosa muy negra, que no ve solución al problema, a sacar la fábrica adelante', afirmó el secretario del comité de empresa, José Ignacio González. Según los sindicatos, la empresa pierde unos nueve millones al año.