BBVA y Santander pierden accionistas a pesar de la subida de la Bolsa
La fuerte subida de la Bolsa -el Ibex 35 se ha revalorizado un 15,57% entre marzo de 2004 y marzo de 2005- no ha frenado la salida de particulares de las grandes entidades financieras españolas. En BBVA pesó la entrada y posterior salida de Sacyr Vallehermoso en su capital, mientras que Santander integró a los accionistas de Abbey.
Los inversores particulares muestran cada vez más reticencias a permanecer en el capital de los grandes bancos, en cuya base accionarial están ganando peso los institucionales. Su salida contrasta, además, con el buen tono mostrado por la bolsa: el Ibex 35 se apuntó el pasado año una ganancia del 17,36%, mientras que entre marzo de 2004 y marzo de 2005 también ofrece un balance positivo del 15,47%.
Las cotizaciones de Santander y BBVA mantuvieron un comportamiento dispar. Santander se vio castigado en 2004 por la compra de Abbey National y se dejó un 2,77% en el año. En este periodo, BBVA se revalorizó un 19,18%, impulsado por la buena acogida que tuvo en el mercado la adquisición de la totalidad del mexicano Bancomer. La brecha entre ambos se ha cerrado en el primer trimestre de este ejercicio.
Dos hechos han distorsionado el comportamiento de los inversores particulares. En el caso de Santander, la integración de Abbey National aumentó su base accionarial en 1,6 millones de accionistas. De esta cifra, un 72,73% eran institucionales y el 27,07% particulares. Si se excluye esta aportación, el banco español perdió el pasado año sólo 50 inversores particulares. Pero en el primer trimestre de este año, el retroceso ha ascendido a 107.223, hasta los 2,57 millones actuales.
Santander incorporó el pasado año 1,6 millones de accionistas del británico Abbey
Santander ha exportado al Reino Unido los incentivos que tiene en España para sus accionistas, como el plan de reinversión de dividendos o productos en condiciones ventajosas -la tarjeta American Express o la póliza de asistencia sanitaria, por ejemplo-. Mayor ha sido la huida en BBVA, entidad en la que el número de pequeños accionistas bajó el pasado ejercicio en 77.867, hasta los 1,08 millones. La caída es aún más abultada entre marzo de 2004 y marzo de 2005, con un descenso de 91.515 particulares, hasta 1,05 millones.
Los analistas aseguran que en esta evolución tuvo efecto la entrada de la constructora Sacyr Vallehermoso. Sacyr adquirió opciones sobre acciones del BBVA, así como títulos directamente en el mercado, para intentar hacerse con un 3,1% del capital de la entidad. 'Sacyr tenía adquiridas opciones a través de Société Générale, que para cubrirse compró a minoritarios', matizan. Posteriormente, el pasado febrero, la constructora decidió desprenderse de este paquete de acciones.
Otra de las explicaciones es que muchos inversores particulares prefieren vender cuando el valor está subiendo y esperar una corrección para volver a entrar en el mercado. Fuentes del BBVA destacan que, a pesar de este retroceso, 'su base accionarial es muy fiel', aunque reconocen que 'ha habido mucha volatilidad en los accionistas con menos de 500 títulos'.
El BBVA creó en diciembre de 2003 una unidad especializada en la gestión de grandes accionistas individuales, destinada a atender las necesidades de los 2.000 inversores que cuentan con un mínimo de 60.000 títulos del banco.
Santander prevé volver a cotizar en Londres este verano y BBVA también tiene previsto saltar al parqué mexicano en junio.
Más peso de los institucionales en detrimento de los individuales
La estructura de la base accionarial del Santander y el BBVA es estable, aunque han ido perdiendo peso los particulares. En diciembre de 2004, un 40% de los accionistas del BBVA eran individuales -de esta cifra, un 2,5% corresponde al capital en manos de los empleados-, frente al 44,1% de un año antes. En Santander, la concentración es mayor, al pasar del 32,81% al 25,05% . Los trabajadores tienen un 0,81%. El porcentaje de los institucionales, sin embargo, ha aumentado en el BBVA del 54,7% al 58,8% y en el Santander del 57,27% al 69,92%. Otro de los cambios ha sido el descenso del capital controlado por los consejos. En Santander, los miembros del máximo órgano de gobierno cuentan con el 4,21%, frente al 9,48% de de 2003. Este retroceso se explica por la salida del representante del escocés Royal Bank of Scotland, que vendió su participación en el banco español, tras adquirir Santander el Abbey National, y el fallecimiento del empresario portugués Antonio de Sommer Champalimaud. En BBVA, ha bajado del 1,2% al 1,1%.
El Popular y el Pastor, las excepciones
Algunas entidades, como el Banco Popular y el Banco Pastor, se han desmarcado de la tendencia general y se han visto favorecidas por la entrada de pequeños accionistas en su capital. Su número se ha disparado en el Popular en los últimos doce meses un 7,21%, hasta situarse en 79.295 a finales del pasado marzo. En el Pastor, el incremento ha sido más moderado, del 3,16%, con lo que sus accionistas ascienden ya a 76.181.El resto de entidades de tamaño mediano tuvieron peor suerte. Banesto pierde un 15,12% de inversores particulares, hasta los 114.031, mientras que en Bankinter bajan un 12,54%, hasta los 106.522. Sabadell, que el pasado año culminó la integración del Banco Atlántico, contaba a finales de marzo con 66.982 accionistas, frente a los 68.837 del mismo mes de 2004.La banca, en general, estuvo bastante volátil en Bolsa durante el pasado ejercicio, debido a las continuas especulaciones sobre posibles movimientos corporativos en el sector tras la adquisición del Zaragozano por Barclays y del Atlántico por el Sabadell.