Deutsche Börse eleva su dividendo para aplacar a los accionistas más descontentos
La directiva de Deutsche Börse lucha desesperadamente por evitar su caída. Ayer anunció ante los analistas un aumento de la retribución al accionista hasta los 1.500 millones de euros para 2007, lo que se ha interpretado como un intento de aplacar a los accionistas más beligerantes.
Los principales accionistas de Deutsche Börse, el operador de la Bolsa de Fráncfort, encabezados por el fondo de alto riesgo The Children Investment Fund (TCI), quieren forzar la destitución del presidente del consejo, Rolf Breuer, en la junta del 25 de mayo.
Los accionistas han mostrado su descontento con el actual equipo directivo, principalmente después del fallido intento por hacerse con el control de London Stock Exchange (LSE), el operador de la Bolsa de Londres.
Los accionistas opinaron entonces que la oferta iba en contra de los intereses de la Bolsa alemana y que lo que debía hacer el consejo era proponer un aumento de la retribución al accionista.
Ayer, durante una presentación, la ejecutiva de Deutsche Börse explicó a los analistas su plan de retribución al accionista, consistente en el pago de 1.500 millones de euros hasta 2007 a través de una combinación de recompra de acciones y dividendo.
La compañía destinó a dividendo un 29% de sus beneficios de 2004 y espera aumentar ese porcentaje hasta el 50% con el tiempo.
Sin embargo, los analistas que ayer asistieron a la presentación afirmaron después que la cifra de 1.500 millones de euros es insuficiente para aplacar a los accionistas díscolos, que además de un cambio en el consejo y la destitución de su presidente, reclaman un dividendo de casi 2.000 millones de euros, la cifra reservada para la operación de LSE. Esta demanda se apoya también en el anuncio que hizo la compañía de que tendrá un excedente de liquidez de 1.000 millones de euros para final de este año.
Durante la presentación de ayer intervino Werner Seifert, director ejecutivo de Deutsche Börse, el cual urgió a los accionistas a preservar la estabilidad del actual consejo y el equipo directivo. Seifert esgrimió los logros de Deutsche Börse desde 1993 y pidió a los accionistas que acudan a la junta del 25 de mayo. Este ejecutivo es susceptible de perder su puesto si cae Rolf Breuer. Los analistas consideran que una afluencia masiva a la junta beneficiaría al equipo directivo actual. A una pregunta de un analista Seifert afirmó que sólo retomaría la oferta sobre LSE en caso de que hubiera un consenso amplio entre los accionistas, lo cual, dijo, no se da en este momento.
Moody's puso ayer en revisión la deuda de la compañía para una posible rebaja de calificación.