El ahorro familiar baja una décima, hasta el 10,5% de la renta disponible

Las familias españolas tienen cada vez más problemas para ahorrar. Según hizo público ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de ahorro de los hogares cayó una décima en 2004, hasta situarse en el 10,5% de su renta disponible, una vez pagados los impuestos.

Esta tasa queda muy lejos del 14,5% registrado hace tan sólo una década (1995). Las dificultades para ahorrar provienen porque el aumento del gasto en consumo final de las familias, que el año pasado creció al 6,6%, queda por encima del aumento de la renta disponible familiar (6,5%).

Es decir, se incrementó el sueldo y el flujo de prestaciones sociales y transferencias recibidas, pero no fue suficiente para contrarrestar los capítulos de gasto familiar. Además del consumo a corto plazo, las familias tienen que hacer frente a un creciente endeudamiento fruto los créditos hipotecarios a los que se ven obligados para financiar la compra de su vivienda.

Con todo, el nivel de ahorro generado por los hogares ascendió a 53.750 millones de euros en 2004. Este ahorro, unido al crecimiento de las transferencias de capital recibidas, fue suficiente para financiar el fuerte volumen de inversión realizada. Así, las familias tuvieron una capacidad de financiación global de 923 millones de euros, cuantía que, no obstante, supone la mitad de la de un año antes (1.992 millones) y un nivel que es el más bajo desde 1995.

Todos empeoran

No sólo los hogares, todos los sectores institucionales empeoraron su situación financiera en 2004.

Las administraciones públicas pasaron de un superávit de 3.024 millones a un déficit de 2.384 millones; las sociedades no financieras elevaron su necesidad de financiación en 7.000 millones de euros. En su conjunto, la economía española duplicó, del 2,1% al 4,2% (33.700 millones), su necesidad de financiarse del exterior.