Suez y Agbar afrontan un nuevo conflicto por las tarifas del agua en Argentina
El grupo francés Suez, participado por Aguas de Barcelona (Agbar), se enfrenta a un nuevo conflicto en Argentina, esta vez con el Gobierno provincial de Santa Fe. Suez amenaza con rescindir el contrato de suministro de agua potable si no se aumentan las tarifas, mientras las autoridades responden con dureza que 'tendrá que hacerse cargo' de indemnizar al Estado provincial y a los usuarios.
Así lo manifestó el gobernador santafesino, Jorge Obeid, en unas declaraciones publicadas por la prensa local. Señaló que Aguas de Santa Fe, en la que Suez tiene como socio a Agbar, no ha cumplido con las inversiones comprometidas al cabo de diez años de la concesión.
Este conflicto se suma al que mantiene el Gobierno argentino con Aguas Argentinas, también controlada por Suez en una sociedad con Agbar, por ajustes de las tarifas y los planes de inversión en el servicio que presta en Buenos Aires y su área metropolitana.
En Santa Fe, otras autoridades presumen que la compañía abandonará la concesión e indicaron que en ese caso se estudia que el Estado se haga cargo del servicio con vistas a volver a privatizarlo.
Suez, por su parte, exige que se le autorice un aumento de tarifas a Aguas de Santa Fe bajo la amenaza de rescindir su contrato 'por culpa' del Gobierno santafesino, demanda que la Fiscalía del Estado provincial tiene plazo para responder hasta el próximo lunes.
'Con la desinversión en obras que hace Aguas de Santa Fe nos vamos a quedar sin agua aunque la empresa se quede', advirtió Obeid, quien aclaró que 'nadie ha pedido' que la compañía deje el servicio. Añadió que ve 'con preocupación' que la empresa 'durante diez años no haya hecho estas inversiones, algo que se manifiesta en caída de la calidad del servicio'.
Mientras, el ministro de Obras Públicas provincial, Alberto Hammerly, dijo a la prensa local que su 'impresión' es que la Fiscalía 'va a rechazar' la demanda de la empresa. Hammerly dijo que se estudian varias alternativas en caso de que Aguas de Santa Fe abandone el servicio, lo que supondría una demanda por incumplimiento de contrato. Y explicó que ya se han realizado auditorías en previsión de que pueda volver a privatizarse.