El sector exige que la Junta de Andalucía renuncie a los préstamos de libros de texto
El sector del libro, liderado por las distintas asociaciones regionales y nacionales, se ha levantado en bloque contra la Junta de Andalucía. Editores, libreros, distribuidores y escritores presentaron ayer un manifiesto que acusa a la Administración autonómica de atentar contra la calidad de la educación, la cultura y contra la supervivencia de las librerías con el nuevo modelo de incentivos a la adquisición de libros de texto que cambiará las ayudas directas a las familias (cheques-libro) por el sistema de préstamo, gestionado por los centros escolares.
A juicio del sector, este modelo 'obsoleto y denigrante' que podría restar el 22% de las ventas a las librerías ha fracasado en otros países como Francia por ser 'socialmente injusto, ineficaz y caro'.
El sector, que exige la reposición de los cheques-libro, tildaron la medida de 'tercermundista' y llegaron a acusar a la Junta de 'demagogia y fullería' por presentar como gratuidad un modelo que consiste en el préstamo 'de libros usados'. También expresaron su protesta por la falta de diálogo y exigieron un proceso de negociación que podría arrancar hoy mismo.