Telefónica reorganiza sus filiales para poner freno a la fuga de clientes

¦bull;Amatriaín será la responsable de Móviles España ¦bull;Javier Aguilera se traslada a TPI ¦bull;Nuevo consejero delegado en la empresa de telefonía fija nacional

Las dos grandes filiales de Telefónica en España han sido incapaces de contener en el primer trimestre la fuga de clientes hacia sus competidores y César Alierta ha dicho basta. Convirtiendo las especulaciones de meses en realidad, el presidente ha reorganizado la cúpula de Telefónica de España, Móviles España y TPI. Todo ello, en busca de una 'mayor agresividad comercial' y de la 'recuperación de las cuotas de mercado' perdidas en la telefonía fija y móvil nacional, según fuentes de Telefónica.

La más beneficiada por los cambios es Belén Amatriaín, hasta ahora presidenta de TPI. Su nuevo reto será dar la vuelta a la negativa evolución de Telefónica Móviles España en su pugna con Vodafone, desde el cargo de consejera delegada del negocio celular nacional. Precisamente ayer, la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) hizo públicos los datos de la portabilidad -cambio de clientes entre operadoras- en el primer trimestre y los números no son favorables.

La ganadora es Vodafone, que suma 181.900 usuarios robados a sus rivales en tres meses. Amena ha captado 21.048 consumidores en este tiempo. Telefónica Móviles, mientras tanto, ha perdido más de 200.000 clientes desde 2004. Al margen de estas cifras, al cierre del año pasado la firma había caído por primera vez por debajo del 50% de cuota de mercado.

La operadora tendrá un observador en Cesky Telecom hasta que sea comprada

Amatriaín deja un puesto de presidenta de una empresa que cotiza en Bolsa y está en el Ibex, pero asume una responsabilidad mayor, a pesar de que ahora tendrá por encima a Antonio Viana, presidente de Telefónica Móviles. No hay que olvidar que la compañía celular es uno de los principales sostenes de los resultados del grupo y que dentro de Móviles, España es la clave.

Sobre todo en el último año, Telefónica Móviles ha hecho varias operaciones para crecer en Latinoamérica y disminuir la dependencia de España, pero aún así la evolución nacional es 'vital' para el grupo y se ha dado un giro 'para intentar amarrar los resultados', explican fuentes conocedoras de las decisiones.

Rotación de directivos

En aplicación de la 'filosofía de integración y rotación de ejecutivos expresada con ocasión de su última cumbre de directivos' de Telefónica, el hasta ahora consejero delegado de Móviles España, Javier Aguilera, sustituirá a Amatriaín al frente de TPI.

Aguilera cuenta con muchos años de experiencia dentro de Telefónica y Alierta ha querido reconocérselo con la presidencia de una empresa cotizada, de sólida trayectoria y muchos proyectos en cartera. Su reto será diversificar los resultados de TPI y hacerla menos dependiente de las guías en papel.

La tercera filial afectada por la remodelación es Telefónica de España, aunque en grado menor. Julio Linares permanece al frente de la filial que lleva el negocio de telefonía fija nacional y la cúpula directiva se ve reforzada por la llegada de un consejero delegado, algo inédito en la historia de esta compañía.

Guillermo Ansaldo asumirá este puesto y desde él tendrá que ayudar a Linares en la tarea de poner coto a la agresividad de los rivales, sobre todo en banda ancha. Los datos de la CMT del primer trimestre también constatan el crecimiento de los competidores de Telefónica, que cada vez llegan a más clientes con acceso directo a través de la infraestructura del ex monopolio -la llamada desagregación del bucle-. Además, la cuota de mercado en ADSL cayó el año pasado más de cuatro puntos, hasta el 55,5%.

Ansaldo era hasta la fecha director general en Telefónica Latinoamérica, bajo el mando de José María Álvarez-Pallete, y anteriormente estuvo en McKinsey. Está considerado dentro de la compañía como un 'buen gestor' y 'riguroso', 'con las ideas muy claras'.

Otro motivo de su llegada es que ahora Linares tendrá más trabajo, ya que supervisará la evolución de Cesky Telecom, hasta que la compra sea definitiva y Telefónica decida si la integra en alguna filial y dónde. Hasta ese momento, Jaime Smith será el encargado vigilar la nueva adquisición, ya que estará de observador en Cesky.

Protagonistas: Tres nombres para nuevos retos

Belén Amatriaín llegó a Telefónica de la mano de Juan Villalonga y pronto comenzó a trabajar con Fernando Abril. El entendimiento fue inmediato y Abril la situó como su sustituta en la presidencia de TPI cuando él la abandonó. Ahora da el salto a una de las principales filiales del grupo.Javier Aguilera lleva muchos años en Telefónica y ha pasado por varios puestos. En Móviles España ha tenido que lidiar con la competencia de Vodafone, que en los últimos meses ha demostrado su buen hacer. Pese a ello, la cuota de Móviles España es una de las más altas de los ex monopolios europeos.Julio Linares llegó a Telefónica hace 35 años y ha desarrollado en la compañía toda su carrera laboral. La supervisión que tendrá que hacer en Cesky le da una proyección internacional que hasta ahora no tenía. Su verdadera batalla, sin embargo, es resistir la competencia en ADSL.