Bruselas identifica 40 trabas a las fusiones transfronterizas
La Comisión Europea publicó ayer un exhaustivo inventario de las trabas que están frenando las fusiones transfronterizas en el sector financiero. Bruselas se propone eliminarlas, aunque primero desea recabar la opinión del sector.
El inventario identifica hasta 40 obstáculos legales, fiscales, regulatorios o económicos que parecen impedir las fusiones transfronterizas en el sector financiero. Bruselas reconoce que algunos de ellos, como los ligados a diferencias culturales o lingüísticas, seguirán restando atractivo a la consolidación transfronteriza del sector. Pero el resto se debe a normativas que pueden ser corregidas, por vía legislativa o judicial, para facilitar las fusiones transfronterizas.
El comisario europeo de Mercado Interior, Charlie McCreevy, prometió ayer que la Comisión intentará eliminar los obstáculos. Pero antes desea escuchar al sector. El período de alegaciones estará abierto para todas las partes interesadas hasta el próximo 15 de junio. 'La Comisión se enfrentará a cualquier fallo del mercado o vacío legal que se señale', anuncia McCreevy.
De momento, su equipo ha preparado un largo listado que 'intenta explicar todos los posibles factores que posteriormente deben o pueden ser eliminados para conseguir el objetivo de mejorar el funcionamiento del mercado interior de servicios financieros'.
Aspectos a tener en cuenta
Entre la maraña fiscal que Bruselas se propone desenredar figuran la trasnochada legislación comunitaria sobre el IVA aplicable a los servicios financieros; las discrepancias entre las haciendas nacionales sobre el tratamiento de las ganancias o pérdidas transfronterizas; o la flagrante discriminación hacia productos financieros procedentes de otro país.
La Comisión ha iniciado, además, la reforma de la directiva europea sobre banca porque, a su juicio, 'ofrece a los supervisores nacionales demasiado margen para vetar operaciones transfronterizas'. Las normas sobre protección del consumidor también se prestan en ocasiones a servir de coartada para cerrar un mercado a los predadores extranjeros. Y en estos casos, dice Bruselas, el potencial abuso de las autoridades resulta muy difícil de demostrar ante los tribunales. La armonización podría ser una solución.
El inventario de estas trabas responde a la creciente inquietud de las autoridades comunitarias ante la persistente fragmentación del sector financiero en feudos nacionales. Las entidades más grandes de la Unión Europea sólo captan el 3 o 4% del total de los depósitos comunitarios, mientras que los 10 mayores bancos estadounidenses controlan el 62% de los activos y el 47% del capital de aquel país.
En Europa, entre 1999 y 2004, sólo el 20% de las fusiones en banca o seguros fueron transfronterizas, mientras que en otros sectores ese tipo de operaciones supuso el 45% del total. La adquisición el año pasado del banco británico Abbey National por el español SCH es uno de los pocos ejemplos de operaciones transfronterizas. El BBVA y el holandés ABN Amro intentan ahora repetir la jugada en Italia.