La pesadilla de las TMT
Muchos inversores quedaron atrapados en la pesadilla que ha sido invertir en fondos de tecnología, medios de comunicación y telecomunicaciones. Un buen número de analistas y gestores profesionales han creído ver la luz al final del túnel. Sin embargo, la realidad es tozuda, ya que han sido numerosos los mensajes surgidos en este sentido en los últimos tiempos, tras años de fuertes caídas. El año 2005 concretamente, se presentaba para bastantes profesionales como aquél que podía marcar un cambio de tendencia, al marcarse en el mes de marzo cinco años desde el pinchazo de la llamada burbuja tecnológica.
Los más de 100 días transcurridos del presente año desgraciadamente muestran una continuación de las pérdidas, mientras que una mayoría de índices bursátiles mundiales proporcionan retornos moderadamente positivos. El índice tecnológico por excelencia, el Nasdaq es quizá el mejor ejemplo de ello. Su pérdida acumulada en el año 2005 supera el 9%, lo que se compara negativamente con la más modesta caída del 3,15% del S&P 500 o la ganancia del 4,55% del Dow Jones Stoxx 50 europeo. Este índice, tiene un fuerte peso de compañías en el sector de las tecnologías de la información y más reducido en el de las telecomunicaciones.
El sistema de clasificación global de Lipper permite distinguir entre fondos que invierten en empresas de tecnología y en empresas de telecomunicaciones. De este modo, la pérdida media de los fondos autorizados a la venta en España, pertenecientes a la categoría Lipper Renta Variable Sector Telecomunicaciones, es del 0,76% este año. El resultado es peor en el caso de los fondos pertenecientes a la categoría Lipper Renta Variable Sector Tecnología, ya que se dejan un 3,70% en ese mismo periodo. Si tomamos en consideración periodos más largos, como uno, tres y cinco años, observamos que el mejor comportamiento relativo de las telecos se mantiene. Es en los últimos tres años donde la distancia es significativa, ya que estos fondos pierden un 14,25% de media mientras que los tecnológicos ahondan esa caída hasta el 30,76%.
Ello pone de relieve la traducción en resultados positivos de algunos hechos que hemos observado recientemente: la recuperación de los resultados empresariales de una mayoría de las grandes compañías de telecomunicaciones globales, de las que Telefónica es un buen ejemplo; el saneamiento de los balances acometidos por muchas de estas mismas empresas; o los planes de volver a la senda de la inversión por las compañías del sector tras la larga travesía por el desierto. Eso último quedaba de manifiesto, a nivel doméstico, en las recientes declaraciones del secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros, en las que animaba a los operadores a volver a invertir de forma productiva, para intensificar la competencia y mejorar la calidad del servicio.
Hay que destacar que la cotización del dólar con respecto al euro tiene una importante influencia en las rentabilidades finales que pueda obtener el inversor español. De este modo, el impacto ha sido negativo si tomamos en cuenta los tres últimos años pero ha favorecido los retornos de los últimos meses. La razón hay que buscarla en la destacada ponderación que los valores denominados en la divisa norteamericana tienen en los principales índices de referencia usados por los gestores de estos fondos. La selección de fondos con un determinado foco geográfico o monetario, acorde con nuestras expectativas, puede ayudarnos a obtener mejores resultados. La información proporcionada en el prospecto, informes de gestión, fichas y carteras será de gran utilidad a este efecto.
Dentro de la categoría Lipper Renta Variable Sector Telecomunicaciones el fondo más destacado del año es el ABN Amro Telecommunication Services A EUR. Este fondo lanzado recientemente por la gran entidad financiera holandesa ABN, se caracteriza por la selección de valores dentro de subsectores con gran potencial de crecimiento como hardware de redes, equipos de comunicaciones sin hilos o tráfico de datos. Su vocación geográfica es global pero su última cartera muestra que su exposición a Estados Unidos es de sólo un 25%, mientras que las inversiones en compañías de los principales mercados europeos como Reino Unido, Alemania, Italia o España son elevadas. Otro de los fondos destacados es el Fortis L Equity Telecom Europe Cap. Su inversión se concentra por definición solamente en compañías europeas y bate ampliamente su índice de referencia, el MSCI Europe/Telecommunication Services.
Análisis Una visión a muy largo plazo
¦bull;El índice tecnológico más usado, el Nasdaq, se creó hace nada menos que 34 años. Sólo Microsoft representa más del 10% en la ponderación del índice, que cuenta con empresas no tecnológicas.¦bull;Su pérdida acumulada en los últimos cinco años supera el 40%, pero si tomamos en cuenta los últimos diez se transforma en una rentabilidad del 137,64%. Esto representa un 9% anual compuesto, por lo que el verdaderamente largo plazo presenta una cara distinta al de la manida pesadilla tecnológica de los últimos años.