Estée Lauder se renueva con el fichaje de Ford
Estée Lauder busca fórmulas para rejuvenecer. La compañía anunció ayer el fichaje de uno de los nombres actuales de mayor peso en el mundo de la moda: Tom Ford. El lanzamiento de una línea de cosméticos este mismo verano y, en 2006, una gama de productos más amplia, que incluirá un perfume, son los planes inmediatos con el diseñador estrella, ex de Gucci, donde logró multiplicar las ventas de la compañía desde 230 millones de dólares en 1994 hasta los cerca de 3.000 millones de dólares en 2004, convirtiendo a Gucci en una de las marcas de lujo más rentables del mundo.
æpermil;sta es la primera vez que la marca Estée Lauder decide recurrir a un diseñador de moda extranjero para sus productos. Pero la situación de estancamiento que vivía la compañía requería medidas innovadoras.
Ford, que dejó su cargo como director creativo de Gucci el año pasado, llega a Estée Lauder en un momento en que las marcas del grupo han quedado anquilosadas en una imagen poco juvenil y las ventas de algunas enseñas han frenado de forma preocupante su ritmo de crecimiento. Competidores como L'Oréal y Procter & Gamble ganan terreno en el negocio de cosmética y perfumería gracias a las promociones agresivas y a su incursión en nuevos segmentos. Los expertos señalan que las marcas de la histórica compañía, fundada en 1946 por Joseph y Estée Lauder, necesitan una nueva imagen. Entre sus enseñas se encuentran Clinique, MAC, Bobbi Brown y Stila.
Es la primera vez que la firma de cosmética recurre a un diseñador extranjero
El diseñador, que se encuentra lanzando su propia empresa con su antiguo colaborador en Gucci, Domenico De Sole, asesorará a Estée Lauder en la creación de la gama Tom Ford for Estée Lauder, que se venderá a principios de la temporada de verano de 2005. Más adelante, en otoño de 2006, pondrá en el mercado una línea más amplia que incluirá, además de una marca independiente, Tom Ford Beauty, y que contará con una fragancia propia y productos relacionados. Los detalles del acuerdo no han sido desvelados.
William Lauder, nieto de los fundadores y consejero delegado de Estée Lauder desde el pasado ejercicio, ha recurrido a Ford dentro del plan para abrir la empresa a un mercado más amplio. Además de la búsqueda de una imagen más innovadora, Lauder ha lanzado gamas de productos más baratos y busca nuevos canales para su comercialización.
Tom Ford se incorporó a Gucci en 1990 y llegó a ser director creativo en 1994. El diseñador, que trabajó en Yves Saint Laurent, ha logrado labrar su fama gracias al rejuvenecimiento de las marcas donde ha trabajado.
La influencia de sus colecciones y la campañas provocadoras son su seña de identidad. Tras presentar la alianza, John Demsey, presidente de Estée Lauder, aseguró de él que es un 'icono de la industria de la moda, de la misma manera que Estée Lauder lo es de la industria de la belleza. Es una combinación perfecta de lujo, estilo y belleza, que seguro gustará a los consumidores de todo el mundo'.
Estée Lauder controla cerca de la mitad del mercado de alta cosmética de Estados Unidos y tuvo unos ingresos de 5.800 millones de dólares en su último ejercicio fiscal, que finalizó en junio. Mientras que sus productos de cuidado facial y de maquillaje han crecido, las ventas de perfumes han caído. El pasado mes de marzo, la compañía fichó a Andrea Robinson, de L'Oréal, para dirigir las campañas de la marca Estée Lauder.