_
_
_
_
æscaron;ltima

Puma y la FIFA se enfrentan por las camisetas de Camerún

El proceso judicial que hoy comienza en Núremberg, al sur de Alemania, no tiene precedentes. Por primera vez, una empresa del sector del deporte sienta nada menos que a la FIFA en el banquillo de los acusados. El fabricante alemán de artículos deportivos Puma ha demandado a la Federación y le reclama una indemnización de dos millones de euros por el asunto de las camisetas de la selección nacional de fútbol de Camerún, prohibidas en la Copa de África del pasado año.

Puma equipó a la selección camerunesa de fútbol con unas novedosas camisetas totalmente ceñidas al cuerpo y unidas al pantalón, que después fueron declaradas antirreglamentarias por la FIFA. Según Puma, esta decisión no obedeció a motivos reglamentarios, sino que fue fruto de presiones de su competidor Adidas.

El abogado de Puma, Reinhard Stünkel, acusó a la FIFA de 'interferir de forma ilegal' en el negocio de una empresa y aseguró que tiene pruebas de que actuó siguiendo los deseos de Herbert Hainer, presidente de Adidas.

La firma deportiva considera que la decisión del organismo de declarar antirreglamentaria la vestimenta es fruto de las presiones de sus competidores

Esta compañía, segundo fabricante de artículos deportivos del mundo, es uno de los principales socios de la FIFA y suministra, por ejemplo, los balones para los Mundiales de fútbol y los uniformes de los árbitros y trabajadores de la Federación.

Las camisetas de la discordia recibieron en principio el visto bueno. Las prendas, absolutamente pegadas al cuerpo del jugador, no sólo pueden resultar muy atractivas, sino que, además, evitan agarrones del contrario.

Sin embargo, la FIFA cambió de opinión argumentando que estaban unidas al pantalón y constituían, por lo tanto, un equipo de una sola pieza, lo que no es reglamentario. La selección de Camerún fue multada y recibió incluso un punto de penalización por lucir las camisetas en el campo pese a la prohibición. Puma se defiende y afirma que no se trata de una única prenda, 'sino de una camiseta y de un pantalón cosidos'.

Además de la millonaria indemnización, Puma pide que su innovador diseño vuelva a ser reglamentario. La firma de artículos deportivos quiere llamar como testigo al presidente de la FIFA, Joseph Blatter, entre otros directivos de la Federación.

Adidas se defiende y afirma que no tuvo ninguna influencia en la decisión de la FIFA. 'Rechazamos por completo las acusaciones', dijo una portavoz de Adidas a este periódico. La FIFA, por su parte, ha declinado pronunciarse al respecto.

Puma y Adidas, creadas por dos hermanos, mantienen una dura competencia en el sector de artículos deportivos desde hace décadas. En los últimos años, Puma ha ganado en popularidad y ha acaparado la atención general con sus originales productos, sin necesidad de gastar enormes sumas en contratos de patrocinio, como Adidas.

Esta popularidad se ha reflejado también en las ventas. La facturación neta de Puma ha aumentado un 68% en los últimos tres años, hasta los 1.530 millones de euros del pasado ejercicio. Adidas, sin embargo, facturó el pasado año 6.523 millones de euros, un 0,7% menos que en 2002, ejercicio récord para la compañía.

Archivado En

_
_