Anticorrupción se querella contra el ex presidente de Avánzit
Las sospechas han terminado en querella. La Fiscalía Anticorrupción ha acusado al ex presidente de Avánzit Juan Pérez Aparicio de apropiarse de forma indebida de 1,42 millones de la firma.
La Fiscalía Anticorrupción ha interpuesto una querella por un presunto delito de apropiación indebida contra el ex presidente de Avánzit Juan Bautista Pérez Aparicio, por realizar transferencias de fondos a su favor desde el grupo de telecomunicaciones por valor de 1,42 millones de euros en el año 2002.
Esta querella es el resultado de la denuncia realizada a la CNMV por el ex secretario del consejo de la compañía, Luis Juega, que en diciembre del año pasado aportó a la comisión la información que había recabado referente a este tema. La denuncia forzó la dimisión de Aparicio.
En una nota oficial, la Fiscalía explica que sus investigaciones han confirmado los hechos denunciados por Juega. En 2002, y mientras Aparicio era máximo responsable de una de las filiales de Avánzit ordenó desde la compañía que administraba las citadas transferencias de fondos a su favor y de la sociedad Gurugú Inversiones, de la que tenía el 90% de las acciones.
Según la Fiscalía, en total fueron tres transferencias a favor de Pérez Aparicio, por valor de 670.000 euros, y otras tres a favor de la sociedad, por un importe de algo más de 751.000 euros, sin que de ellas exista 'saldo acreedor alguno de la compañía en relación con estos pagos'.
El Ministerio Fiscal detalla también otras cuatro órdenes de transferencias adicionales a favor del querellado que no fueron abonadas por el banco ni contabilizadas y que ascienden a un total de 315.000 euros.
Se da la circunstancia de que Pérez Aparicio abandonó la empresa tecnológica y audiovisual Avánzit en junio de 2002, sólo tres días después de que se efectuara la última de las transferencias a su favor. La razón de su abandono fueron las diferencias que mantenía con el entonces presidente de Avánzit, Rafael Martín Sanz, al que intentó, sin éxito, desbancar de sus responsabilidades.