Sigre recogió 1.654 toneladas de medicamentos en 2004
El sistema Sigre para la recogida de los medicamentos ha alcanzado su madurez al lograr el año pasado recolectar 1.654 toneladas de medicinas de las 20.000 farmacias de toda España. Los laboratorios financian completamente este servicio, que cuenta con un presupuesto de 7,2 millones de euros para 2005.
La recogida de medicamentos a través de Sigre ha crecido a un ritmo de un 20% anual desde que se puso en marcha este servicio de reciclado de medicinas en 2002. 'La simbiosis del medio ambiente y la salud es muy positiva para que el mensaje cale', comenta Juan Carlos Mampaso, director general de Sigre quien se muestra muy satisfecho con la rápida acogida que ha tenido el servicio.
En tres años han logrado que las 20.000 farmacias de España, incluidas las de Ceuta y Melilla, instalen en el punto verde de recogida. Sigre no cumple simplemente un objetivo ecológico al evitar que las medicinas acaben en la basura causando daños al entorno, si no que también tiene un apartado social. 'Es buen refuerzo para promover el consumo responsable, recordando que se revise el botiquín doméstico y que se guarden las cajas y prospectos', reflexiona Mampaso, quien resalta el papel de los laboratorios farmacéuticos que se han volcado con este proyecto.
De hecho, son los laboratorios quienes financian por completo este servicio, algo que no sucede con el plástico o el vidrio cuyo reciclado repercute directamente al bolsillo del ciudadano. 'Los laboratorios han hecho suyo del medicamento desde la cuna hasta la tumba', bromea Mampaso al explicar que el sector farmacéutico asumió de manera muy natural la responsabilidad de la retirada de los medicamentos, y que con ella cierran el ciclo completo desde la investigación hasta su destrucción como generador de energía.
De hecho Sigre es un servicio pionero en toda Europa, pues va más allá de lo exigido por la directiva europea y la propia Ley de Envases de 1997. En países como Francia o Portugal quizás se haya empezado antes con estos sistemas, pero Sigre es el único que a la recogida y quema de medicinas suma además el reciclado.
Reciclar envases
Las distribuidoras farmacéuticas también colaboran pues son ellas las encargadas de retirar las medicinas de los puntos Sigre. El sistema de distribución farmacéutico (al menos dos veces al día pasa un distribuidor en cualquier farmacia por muy alejada que esté) hace que esta labor sea sumamente fácil. Una vez almacenados los medicamentos caducados en un contenedor industrial se pasa a una planta de clasificación y selección instalada en Galicia.
Allí se realiza una labor de retirada de cajas de cartón, plásticos y todo el material susceptible de ser reciclado. Actualmente, Sigre está reciclando el 30% del envase, algo que no hacen la mayoría de los países europeos. De hecho, su mayor reto de futuro pasa por lograr un mayor porcentaje de reciclaje. El resto del medicamento se utiliza como combustible para energía eléctrica.
Prohibido donar medicinas usadas
La OMS prohibió en 2000 las donaciones de medicinas que hayan pasado por domicilios, ni que mucho menos estuviesen caducadas. Esta era una práctica bastante habitual hace no tanto tiempo.Cuando Sigre empezó a funcionar se encontró con toneladas de medicinas acumuladas en almacenes para estos fines, que eran rechazadas y no se sabía qué hacer con ellas. 'Las ONG se han reconvertido y tienen centrales de compras para adquirir genéricos en grandes cantidades y para las necesidades específicas de cada momento', explica Juan Carlos Mampaso.De hecho, otro de los fines sociales que se cubre el servicio Sigre es que las medicinas no acaben de manera incontrolada, que se usen para fines ilegales o que puedan producir daños por consumir medicinas caducadas.