Semana Santa de devoción y negocio
Ni las nuevas tecnologías ni la globalización han hecho mella en las procesiones de Semana Santa, que por el contrario no dejan de ganar público y se han visto catapultadas en esta era a las categorías de fenómeno de masas y lucrativo negocio. Perdido ya el carácter íntimo de antaño, la semana de pasión gana cada año más peso en su vertiente comercial y de consumo para preocupación de las cofradías, que ven como queda diluido el sentimiento religioso originario.
Andalucía, donde las procesiones mantienen el protagonismo en estas vacaciones en rivalidad con las playas, es uno de los mejores ejemplos de esta pugna entre devoción y negocio.
Sólo en su vertiente turística, la comunidad recibe cada Semana Santa más de 800.000 visitantes, la mayoría españoles que dejan en las arcas de la región unos 220 millones de euros, según datos de la Junta de Andalucía. Aunque el buen clima que suele acompañar las vísperas primaverales andaluzas arrastra a las playas a casi la mitad de estos turistas, cerca del 20% de ellos elige dedicar sus vacaciones a disfrutar del turismo cultural y de las centenares de procesiones que recorren las calles de las principales ciudades andaluzas.
Todas las poblaciones con tradición cofrade se vuelcan en la captación de visitantes para sus desfiles, estimuladas por el dato de que el turista cultural gasta nada más y nada menos que el doble que el visitante medio, un total de 78 euros en cada jornada.
Según las previsiones de la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía, la comunidad registrará en la Semana Santa de este año un 3,2% más de pernoctaciones, aunque las reservas hoteleras de última hora podrían elevar las visitas por encima del millón siguiendo los cálculos de los hoteleros. Salvo Málaga y Córdoba, el resto de provincias mejorarán su afluencia turística en 2005, especialmente Sevilla, Granada y Huelva. El Gobierno andaluz espera una ocupación en los días punta del 72%, mientras que los empresarios del sector elevan este porcentaje al 78%.
El fenómeno de la pasión por los pasos de cristos y vírgenes cobra especial dimensión en ciudades como Sevilla, que ha hecho de la Semana Santa una de las grandes banderas de la ciudad. En conjunto, la capital andaluza mueve en estas fechas 160 millones de euros, nada menos que el 3% del PIB local si se añaden los 213 millones de euros del impacto económico de la más laica y también populosa Feria de Abril, que se celebra dos semanas después del repliegue de los nazarenos.
La ciudad quiere también sacar mayor partido de sus talleres de arte sacro aprovechando que se ha convertido en una referencia internacional para los compradores de imaginería. Para ello proyecta la construcción de un parque empresarial especializado en este sector donde se reúnan los principales artesanos de arte sacro.
Además del flujo económico de hostelería, restauración o de los gastos derivados de la participación en las procesiones, el negocio de la Semana Santa se ha diversificado en los últimos años dando lugar a una suerte de industria auxiliar que está sacando oro del mundo cofrade. El estudio El mercado de la devoción, realizado por la Unión de Consumidores de Andalucía (UCA-UCE) constata así la 'creciente mercantilización' de la Semana Santa, que se reinventa a si misma y es capaz de vender a través de establecimientos especializados, colecciones de prensa o portales de internet todo tipo de objetos vinculados al mundo cofrade. Algunas hermandades han comenzado a registrar la propiedad intelectual y mercantil de sus símbolos y señas de identidad ante la evidencia del negocio que supone para terceros la venta de las reproducciones de sus imágenes o enseres. También pretenden protegerse de agresiones a su imagen como la que tuvo lugar con el videojuego Matanza Kofrade, que originó una fuerte polémica entre los sectores llamados capillitas.
Los turistas contribuyen a este movimiento económico que generan los pasos y las cofradías, aunque una buena parte del mismo es una aportación de las legiones de seguidores locales. Según datos del estudio de la UCA, la implicación activa en los cortejos procesionales andaluces, una tradición que pasa de padres a hijos, puede llegar a los 1.300 euros para el caso de los penitentes o nazarenos más lujosamente ataviados. Estos nazarenos deberán hacerse con el hábito de su cofradía, pagar la cuota de la hermandad y abonar la llamada limosna de salida, que puede alcanzar los 300 euros. En las opciones más modestas, el hábito de penitente cuesta de 150 a 180 euros y la cuota de salida sólo supone seis euros.
Más asequible es la alternativa del alquiler, que permite lucir como penitente desde unos 20 euros. Para los portadores o costaleros, las personas que cargan a hombros con las veneradas imágenes, la adquisición de la indumentaria es menos costosa y puede oscilar entre 60 y 100 euros de media.
En el caso del precio y los derechos del alquiler de sillas y palcos para presenciar las carreras oficiales de las procesiones, la horquilla es muy amplia si tomamos como ejemplos las plazas andaluzas donde la Semana Santa es más fuerte, como Sevilla y Málaga, y aquellas otras con menor dimensión cofrade. Según el informe de la UCA, que analiza los gastos de la Semana Santa en las ocho capitales andaluzas además de Jerez de la Frontera (Cádiz), la mayoría de las grandes y medianas ciudades de la comunidad ofrecen asientos para disfrutar de la puesta en escena de los desfiles. En el caso de Sevilla, estas piezas están tan cotizadas que las localidades quedaron agotadas varios días antes del inicio de las procesiones, que arrancaron el viernes.
Adquirir un palco de seis a ocho asientos puede rondar de media los 200 euros para toda la Semana Santa, aunque en Sevilla puede subir a 550 euros y en Huelva se oferta a 120. Para las sillas individuales, la tarifa es más asequible y puede rondar los 30 euros de media para toda la semana, aunque los dos polos pueden encontrarse en los 18 euros de Jerez y los 87 de la capital andaluza.
Sin embargo, los derechos vitalicios que consagran algunas ciudades provocan que en estas plazas sea misión imposible hacerse con un abono independientemente del dinero que se esté dispuesto a pagar. Pese a que está expresamente prohibido, la reventa funciona como consuelo en toda Andalucía, donde los precios de palcos y sillas pueden incluso triplicarse.
La explosión del coleccionismo se mantiene durante todo el año
Fotos, medallas, puzzles, vídeos y docenas de artículos en versión cofrade como un ajedrez, maquetas, juegos tipo Trivial o camisetas por encargo con la imagen de la cofradía favorita. Así de variopinta es la oferta de objetos vinculados con la Semana Santa, un sector que se ha extendido por todos los formatos comerciales posibles y que ya se comercializa en portales de internet, venta por catálogo o tiendas especializadas. El negocio está alimentado por el afán coleccionista que anima a los devotos del mundo cofrade, que mantienen su pasión por la imágenes de Semana Santa durante todo el año.La mayoría de los portales de la Red especializados en información sobre cofradías incluye también una tienda on line con una variada gama de artículos. Se pueden encontrar cajas de incienso por seis euros, miniaturas de pasos completos por 100 o una imagen también en miniatura con todos los complementos posibles para montar una capilla en casa. Entre los proyectos de internet más seguidos destacan La pasión digital, un portal de origen sevillano que ya incluye ofertas de toda España, Arte Sacro o El Nazareno. Un fenómeno que mantiene su auge en Andalucía gracias a la ferviente respuesta del público es el de la apuesta de la prensa escrita por las colecciones vinculadas con la Semana Santa. Estas promociones que acompañan a los periódicos y que les ayudan a reforzar su tirada se mantienen durante meses más allá de los días cofrades del año. Se trata de libros, DVD, CD, escudos o fotografías que han rescatado aspectos inéditos de la Semana Santa.
Casi 500 procesiones sólo en las ocho capitales andaluzas
sevilla. La capital andaluza se alza con la mayor y más reconocida oferta de procesiones de la comunidad. Desfilan 56 cofradías que ponen en las calles un total de 114 pasos a lo largo de ocho jornadas de penitencia. La ciudad dispone de 37.000 plazas entre sillas y palcos para disfrutar de espectáculos tan populares como las procesiones de la virgen Macarena, la Esperanza de Triana, El Cachorro o el Gran Poder, una de las imágenes de Juan de Mesa más exportadas de la Semana Santa sevillana.
Málaga. Es la otra gran baza de la Semana Santa andaluza. Procesionan un total de 41 hermandades que hacen desfilar hasta 77 tronos a lo largo de siete jornadas de penitencia. Entre las imágenes más veneradas de Málaga se encuentran la de Jesús el Rico, que cada año libera a un preso, la cofradía de La Buena Muerte y su desfile de legionarios o El Cautivo, del popular barrio de La Trinidad. El preso indultado este año por Jesús el Rico es un jardinero de 32 años que cumplía una condena de tres años en la prisión de Alhaurín de la Torre por un delito relacionado con las drogas.
córdoba. De honda tradición, la Semana Santa cordobesa cuenta con 35 cofradías y 65 pasos que procesionan en ocho jornadas. Ofrece 5.000 plazas en asientos para disfrutar de singularidades como su venerada virgen de la Hermandad de Los Dolores o la de Las Angustias, que desfilan sin palio. También entre las más populares figura Remedio de Ánimas, una cofradía fundada por escritores y pintores cordobeses.
Granada. La ciudad de La Alhambra vive una Semana Santa de ocho jornadas en las que procesionan 32 cofradías que ponen en las calles hasta 59 pasos. Entre las imágenes más populares y queridas de Granada sobresale El Silencio, que al igual que en otras capitales andaluzas desfila el Jueves Santo sin música ni ruidos. La Estrella y Santa María de la Alhambra, que procesiona con legionarios, son otras de las más seguidas.
cádiz. Las 29 cofradías de Cádiz capital hacen desfilar un total de 52 pasos a lo largo de ocho jornadas. Dispone de 2.600 plazas entre sillas y palcos para seguir el recorrido de procesiones tan populares como La Palma, El Nazareno o el Santo Entierro.
jerez de la frontera En la provincia de Cadiz destaca también esta ciudad con 32 hermandades y 59 pasos que procesionan en ocho jornadas. En Jerez son especialmente populares las imágenes de Jesús del Prendimiento, procedente del barrio gitano de Santiago, y el Cristo de la Expiración.
Huelva. La Semana Santa de Huelva atesora 23 cofradías que ponen en las calles un total de 43 pasos en siete jornadas de penitencia. En sillas y palcos para seguir las procesiones cuenta con 6.000 plazas disponibles. Entre sus figuras más populares y representativas destacan dos vírgenes, La Victoria y La Esperanza, ambas con salida el Miércoles Santo. También es especialmente venerado El Nazareno, una talla que sale la noche del Jueves Santo.
Jaén. La Semana Santa de Jaén se pone en escena con 15 hermandades y un total de 35 pasos a lo largo de ocho jornadas. La figura más querida de esta plaza andaluza es la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, conocida popularmente como El abuelo, que procesiona en la madrugada del Jueves Santo. Entre las vírgenes, destaca La
Magdalena, el Martes Santo, así como el paso de Los Estudiantes, otro clásico de muchas ciudades andaluzas que realiza su penitencia en la jornada del Lunes Santo.
almería. La Semana Santa almeriense se articula a través de 19 hermandades que sacan a la calle un total de 33 pasos a lo largo de ocho jornadas de penitencia. Almería dispone de hasta 3.000 plazas de sillas y palcos y sus imágenes más conocidas son El Prendimiento, Los Estudiantes, ambos con procesión en Miércoles Santo, y El Encuentro, que sale a la calle el jueves. Este año, para festejar la celebración de los Juegos Mediterráneos de 2005, las hermandades de Almería han organizado como novedad la llamada Procesión Magna, que hará desfilar conjuntamente el Viernes Santo a doce cofradías de la ciudad.