El 'enigma' de la renta fija en lo más alto
El último mes ha presenciado un cambio radical en el comportamiento de la renta fija, en concreto la de largo plazo. Todo ello comenzó con las declaraciones de Alan Greenspan a mediados de febrero diciendo, lo que la mayoría de los expertos pensaban, y que no es otra cosa que el comportamiento de la renta fija ha venido siendo un enigma en los últimos tiempos. La subida de tipos a corto no sólo no afectaba a la deuda a largo de la manera esperada sino que las tasas internas de retorno no hacían más que bajar y, consiguientemente, los precios subir.
Todo ello permitió que también los fondos de renta fija euro a largo en el 2004 y el comienzo del presente año disfrutaran de muy aceptables rentabilidades anuales superiores al 3% como media. Sin embargo, el 'anuncio' de Greenspan ha supuesto que desde mediados de febrero las tasas internas de retorno no han hecho prácticamente otra cosa que aumentar. En concreto, el bono español a 10 años ha pasado de retornar un 3,46% el 9 de febrero hasta el 3,76% actual. El efecto en las carteras de los fondos de bonos a largo ha sido inmediato y hemos visto algunas rentabilidades negativas en las últimas semanas.
Aún así, la rentabilidad media acumulada en el año de los fondos pertenecientes a la categoría Lipper Renta Fija Euro es todavía de un 0,48%.