La Bolsa renuncia a asaltar los máximos
Los operadores optaron por la prudencia en la sesión de ayer, en la que se daban las condiciones teóricas para un nuevo asalto a los máximos de tres años y medio. Pero el Ibex cerró con una leve subida del 0,08%, afectado quizás por el miedo a la reedición de las caídas de hace pocas semanas o, simplemente, a la espera de nuevas referencias.
El comportamiento fue similar en otros mercados internacionales. La Bolsa española se contó de nuevo entre las más frías de Europa -un hecho que empieza a ser habitual en este arranque de ejercicio- y la notable subida del índice Nasdaq no se reflejó en el Ibex 35.
Tampoco sirvió de mucho el parón en el precio del petróleo o el tirón de las buenas noticias que llegaron el viernes de Estados Unidos. Los operadores prefirieron guardar la ropa y, si bien el índice sigue por encima de los 9.500 puntos, apenas se registraron movimientos a lo largo de la sesión. Un prueba de que el mercado es más prudente que hace mes y medio y, si entonces prefería exprimir las subidas, hoy el intermediario espera a asegurar la baza antes de lanzar la orden de compra.
En la insignificante subida del Ibex influyó, por encima de todo, el dispar comportamiento de los dos principales valores, puesto que mientras Telefónica subió, Santander bajó. El volumen de negocio, por otra parte, se mantuvo en la línea de las últimas sesiones, alrededor de los 2.500 millones de euros teniendo en cuenta operaciones especiales y bloques.
Atentos a
El euro cedió un 0,23% frente al dólar aunque continuó cotizando por encima de 1,32. El libro Beige de la Reserva Federal, una radiografía sobre la economía de EE UU, que se publicará mañana será la próxima referencia con la que contará el mercado.