El Gobierno de Baleares estrena un polémico juego de apuestas hípicas
Los ciudadanos de Baleares y los más de 10 millones de turistas que cada año pasan por el archipiélago dispondrán, desde el próximo jueves, de dos nuevos juegos en los que apostar su dinero: la lototrote y la promotrote. Se trata de una terminal de ordenador, cuyo aspecto se asemeja a una máquina tragaperras, en la que, por un euro, se podrán realizar apuestas online en las carreras de trote que cada domingo se celebran en el hipódromo de Palma.
Los premios dependerán de la cantidad global de dinero que se ha apostado a lo largo de la semana. La máquina funciona además como una tragaperras convencional, en la que también se podrán hacer apuestas de 20 y de 50 céntimos. En este caso, los premios máximos serán de 200 o de 500 euros, en función de la cantidad apostada.
Los promotores de este nuevo sistema de juego son el Gobierno balear, presidido por el popular Jaume Matas, y el Consell Insular de Mallorca, gobernado por Unió Mallorquina. Ambas instituciones han creado un consorcio con una UTE formada por Cirsa y Troy Jocs, empresas encargadas de gestionar el nuevo juego. El 70% de los ingresos se destinarán a premios y el resto se reparte entre la empresas y el Govern, que destinará los beneficios a la promoción del trote en el archipiélago.
En una primera fase sólo se instalarán 190 de los 2.500 terminales previstos
El nacimiento de este nuevo juego, un empeño de los socios nacionalistas del Gobierno de Jaume Matas, no ha estado exento de complicaciones, derivadas tanto de la oposición de la ONCE, que amenazó con impugnarlo, como del compromiso del Gobierno balear de que no instalará las máquinas en los bares y restaurantes para no fomentar la ludopatía, principal crítica al proyecto, también de la organización de ciegos. El Organismo Nacional de Loterías y Apuestas del Estado (Onlae) también se ha negado a que las máquinas se instalen en sus oficinas y en aquellos lugares donde pueden sellarse juegos del Estado.
El resultado es que de los 2.500 terminales que estaba previsto que se instalaran en un principio, en esta primera fase sólo habrá 190 repartidos en casinos, bingos, salones de juego, estancos, hoteles e hipódromos. La intención de los gestores es ir ampliando progresivamente la red de terminales con el fin de llegar a los 2.500 en los próximos cuatro años.
Ni el presidente del Gobierno balear, Jaume Matas, ni la presidenta del Consell Insular de Mallorca, Maria Antònia Munar, se han atrevido a dar una cifra aproximada de los posibles beneficios anuales que generará esta nueva oferta de juego en las islas. Por el momento, el consorcio del juego tiene previsto redactar un plan de inversiones, que será aprobado en breve, y en el que se prevén actuaciones en el hipódromo de Palma, así como la construcción de un centro de entrenamiento y de un nuevo hipódromo en el municipio mallorquín de Manacor.
El proyecto de creación de la lototrote y promotrote comenzó a gestarse a instancias de Unió Mallorquina en la anterior legislatura, en la que el Gobierno balear estaba en manos del socialista Francesc Antich. Sin embargo, la oposición de los propios dirigentes socialistas retrasó su creación, por lo que ha sido el Gobierno del PP quien finalmente ha implantado el nuevo juego.