La deuda pública es inferior al 50% del PIB por primera vez en 12 años
El buen momento de los ingresos de la Seguridad Social y la mejoría en la recaudación tributaria permitió recortar en 2004 el déficit público previsto al 0,28% del PIB. La deuda cae al 48,9% del PIB, una cifra desconocida desde 1992.
El año 2004 fue otro buen ejercicio para las cuentas públicas. La deuda del conjunto de las administraciones (Estado, Seguridad Social, comunidades y municipios) cayó por debajo del 50% del PIB (hasta el 48,9%) por primera vez desde 1992, según los datos de cierre de contabilidad nacional ofrecidos ayer por el vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes.
El saldo vivo de la deuda, situado en los 390.517 millones de euros a finales de diciembre, se ha visto beneficiado por una política de tipos de interés en la zona euro estancada en mínimos históricos (2%), y que ha permitido al Tesoro español pagar por intereses 3.400 millones menos que un año antes.
'Confiamos en recortar la deuda aún más en 2005, hasta el 46,6%', añadió ayer Solbes. Un porcentaje tan bajo no se registraba desde los años anteriores a la crisis económica de 1993, que obligó al Gobierno socialista de entonces a insuflar gasto público y, por tanto, endeudamiento, para alentar a la economía. La situación de la deuda española contrasta con la de países centrales en la UE como la alemana. La deuda germana se encuentra en el 65% del PIB después de que en 2004 creciera un 5% hasta totalizar 1,4 billones de euros.
El endeudamiento alemán crece un 5% y alcanza 1,4 billones de euros, el 65% del PIB
El descenso de la deuda pública en España ha contribuido en 2004, junto a la mejora de los ingresos tributarios, a mejorar el déficit público previsto inicialmente.
Al final, el año se ha cerrado con un déficit global del 0,28% del PIB (2.254 millones de euros), por debajo del 0,8% estimado por el Ejecutivo en el avance de liquidación de septiembre.
Solbes destacó ayer que si se descontara la asunción de la deuda de Renfe (5.459 millones) y el pago de la deuda histórica de Andalucía (2.500 millones), operaciones 'extraordinarias' no previstas por el último gobierno del PP pero que han sido asumidas por el actual Ejecutivo, las administraciones públicas tendrían ahora un superávit del 0,4% del PIB, ligeramente superior incluso al 0,32% presentado por el ministro Montoro en 2003, el último año gestionado por el gobierno del PP.
El saldo prácticamente equilibrado de las administraciones públicas en 2004 se sustenta, al igual que con el PP, en las excelentes cifras de la Seguridad Social, cuyo espectacular superávit (8.155 millones, el 1% del PIB) vuelve a compensar el desfase negativo del Estado central y sus organismos autónomos. Gran parte del superávit de la Seguridad Social irá destinado a elevar el fondo de reserva de las pensiones, según Solbes.
Los municipios, por su parte, siguen en equilibrio técnico mientras que las comunidades autónomas lo han conseguido en 2004 gracias a los fondos del Estado recibidos por Andalucía (2.300 millones) en concepto del pago de la deuda histórica. Aún no se dispone de cifras desagregadas por regiones.
La recaudación tributaria ha pegado un tirón el último trimestre, creciendo de media en el año un 8,3%, por encima del PIB nominal.
Destaca el espectacular aumento del impuesto de sociedades (18,7%), fruto de los buenos resultados empresariales, seguido por el IVA (9,7%).
Dos puntos mejor que Europa
El saldo presupuestario español contrasta con la situación en el resto de Europa. El ligero déficit español (0,28% del PIB) en 2004 se encuentra dos puntos por debajo de las previsiones que tiene la Comisión Europea para la zona euro (un déficit del 2,9%), una estimación que roza el máximo permitido en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (3%). Las cuentas en el área comunitaria están muy influidas por los 'números rojos' en Alemania, Italia y Francia, los principales países de la Unión, con problemas presupuestarios que se agravan por su débil demanda interna.Menores inversiones Para 2005 el vicepresidente Solbes prevé que España alcance ya un ligero superávit, del 0,1% del PIB, siguiendo la senda del 'equilibrio en el ciclo' en las cuentas públicas. Con todo, hay algunos aspectos que necesitan mejorar. El año 2004 se ha cerrado con una caída de dos puntos en el grado de ejecución de las inversiones estatales. El secretario de Estado de Presupuestos, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, lo achaca al 'parón' en el Ministerio de Medio Ambiente (el más inversor después de Fomento) debido al 'cambio de programación' del departamento. Sin duda, ha influido la marcha atrás en las obras del trasvase del Ebro.