Eslovaquia, la nueva Detroit de Europa, calienta motores
Trabajadores de una zona del oeste de Eslovaquia están terminando las obras de la nueva fábrica de PSA Peugeot Citroën, colocando vías y asfaltando carreteras por campos despoblados para exportar 300.000 automóviles al año a otros mercados de Europa. Peugeot, el segundo fabricante de automóviles de Europa, eligió Eslovaquia en lugar de Polonia, donde los sueldos son un 50% más altos, para construir esta fábrica de 700 millones de euros. La coreana Kia Motors también edificó una planta de 1.100 millones de euros en Eslovaquia, su primera en Europa.
'Hemos buscado un sitio con buena infraestructura, acceso a mercados de Europa Central, posibilidades de tránsito a Europa Occidental y mano de obra cualificada'', asegura Alain Baldeyrou, gerente de la fábrica de Peugeot en Eslovaquia. 'En Eslovaquia encontramos todo esto''.
Empresas internacionales, como Ford, comprometieron el año pasado inversiones por 1.700 millones de euros en Eslovaquia, donde los sueldos y los impuestos son más bajos que en Polonia y la República Checa. Dieciséis años después del colapso del comunismo, Eslovaquia es el cuarto país con mayor índice de crecimiento en el seno de la Unión Europea.
Con una población de 5,4 millones de habitantes, Eslovaquia será el mayor fabricante de automóviles del mundo per cápita en 2007, con una producción de 800.000 vehículos
El presidente estadounidense, George Bush, en su reciente visita oficial al país, elogió a los eslovacos en un discurso en la plaza Hviezdoslavovo en Bratislava, la capital eslovaca: 'Habéis recuperado vuestra soberanía y vuestra independencia. Habéis formado una democracia con éxito. Habéis establecido una economía libre''.
Las iniciativas del primer ministro Mikulas Dzurinda para flexibilizar las leyes laborales y recortar impuestos son algunas de las medidas con las que Europa del Este se ha convertido en el motor de crecimiento de la UE.
Recientemente la empresa estadounidense US Steel, el mayor productor de acero de EE UU, anunció una inversión de 160 millones de dólares en la ampliación de su planta en Kosice, en el este de Eslovaquia.
Con una población de 5,4 millones de habitantes, Eslovaquia será el mayor fabricante de automóviles del mundo per cápita para 2007, cuando la producción llegará a casi 800.000 vehículos, afirma Ludovit Ujhelyi, vicedirector de la Asociación de la Industria del Automóvil eslovaca. Ujhelyi prevé un crecimiento del empleo en el sector de casi el 100%, a unos 100.000 puestos, en cinco años. 'Nos estamos convirtiendo en el nuevo Detroit la ciudad sede de los gigantes del automóvil de EE UU''.
Empresas como Peugeot, Volkswagen, Bosch -el segundo fabricante de componentes de coches del mundo- y Renault están invirtiendo en Europa del Este para aprovechar los sueldos e impuestos más bajos y un mercado de consumo cada vez mayor. En diciembre, el sueldo medio bruto del sector en Eslovaquia era de 18.542 coronas (490 euros), frente a 680 euros en Polonia y 3.400 euros en Alemania. La fábrica de Peugeot, cerca de Trnava, producirá su primer automóvil en enero próximo y alcanzará el objetivo anual de 30.000 coches en 2007, dijo Baldeyrou. Desde su elección en 1998, Dzurinda aplicó un impuesto lineal sobre la renta del 19% para empresas e individuos y flexibilizó las leyes sobre contratación y despidos.