Industria estudia el relevo de Bustelo al frente de la CMT
La resolución de la CMT sobre el traslado a Barcelona ha sido el detonante. El Ministerio de Industria considera que este documento del regulador supone un incumplimiento grave del real decreto aprobado por el Gobierno y está estudiando la destitución del presidente del organismo, Carlos Bustelo, según fuentes del Gobierno.
La chispa ha acabado en incendio. El enfrentamiento entre el Ministerio de Industria y la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) por la decisión del Gobierno de llevar este organismo a Barcelona puede terminar con la destitución de Carlos Bustelo al frente del organismo regulador.
La causa ha sido la resolución de la CMT sobre el traslado a Cataluña. El consejo de la comisión aprobó por unanimidad el pasado jueves acatar la mudanza y emprender los primeros pasos para ello, pero también decidió mantener 'operativas en Madrid las dependencias de la CMT necesarias para garantizar la fluidez de la relación con aquellos órganos y agentes con los que los servicios de la comisión deben interactuar de forma cotidiana en el ejercicio de sus funciones'.
Y el ministerio cree que esta postura deja abierta la posibilidad de que el regulador sólo realice un traslado formal de la sede, pero no absoluto, según fuentes de Industria. Esta circunstancia iría en contra de lo establecido en el real decreto que regula la mudanza a Barcelona, así que, según estas fuentes, Bustelo lo estaría infringiendo con esta decisión, en lo que consideran un grave incumplimiento de sus obligaciones.
El resultado es que Industria está estudiando aplicar al presidente de la CMT el artículo 35 del reglamento que regula la institución. Esta norma establece el procedimiento de cese para los presidentes, vicepresidentes y consejeros de la comisión y dice que los dos primeros 'cesarán en su cargo por renuncia aceptada por el Gobierno, expiración del término de su mandato o por separación acordada por el Gobierno previa instrucción de expediente por el Ministerio de Fomento ahora, Industria, por incapacidad permanente para el ejercicio de su cargo, incumplimiento grave de sus obligaciones, condena por delito doloso o incompatibilidad sobrevenida'.
No hay precedentes en el relevo de un presidente en ejercicio de un organismo regulador, así que la experiencia en este campo es escasa. Sin embargo, la norma deja claro que habrá que abrir e instruir un expediente administrativo que investigue los hechos y llegue a conclusiones. Mientras tanto, según las fuentes antes citadas, Bustelo tiene tiempo para rectificar la decisión adoptada por el consejo de la CMT el jueves. æpermil;sta sería la única forma, según fuentes de Industria, de que no se inicie el expediente.
Bustelo fue nombrado presidente de la CMT por el PP en diciembre de 2002 y su mandato se extiende durante seis años, hasta finales de 2008. Desde el inicio de la legislatura del PSOE ha tenido roces con el Gobierno por la postura de la comisión ante varias propuestas de Telefónica para ADSL, por ejemplo, o la regulación de determinados segmentos. Sin embargo, ha sido el traslado a Barcelona la causa de mayor conflicto, hasta el punto de que Bustelo lo calificó de 'deportación' en unas jornadas del sector de telecomunicaciones hace muy pocas fechas.
La resolución de la discordia
El origen de la posible destitución de Bustelo al frente de la CMT está en una resolución de escasos cinco folios. En ella, la comisión reconoce implícitamente que el Gobierno tiene derecho a decidir su mudanza a Barcelona, pero interpreta que la potestad de instrumentar esa decisión y aplicarla a la realidad es de la comisión.Por ello, después de recoger los fundamentos de derecho que considera que avalan esa tesis, la CMT toma dos decisiones polémicas. La primera es el mantenimiento de alguna dependencia en Madrid y la segunda se refiere a los trabajadores, ya que la resolución establece que 'todas las actuaciones que requieran movimientos de personal serán voluntarias e incentivadas'.Esta última decisión implica que no habría ningún despido y que la CMT renuncia a cualquier mecanismo de presión para alentar los traslados mas allá del incentivo económico. En caso de que los trabajadores dispuestos a moverse fueran insuficientes, se abriría un periodo de contratación en Barcelona.Sin embargo, esta flexibilidad podría poner en peligro el éxito de la decisión del Gobierno de trasladar la sede del regulador ya que retrasaría la puesta en marcha efectiva de la CMT en Barcelona.Ante esta situación, fuentes del Ministerio de Industria recuerdan que la comisión es independiente como regulador de las telecomunicaciones, pero que es un organismo dependiente del Gobierno para el resto de las materias. Como tal, añaden, tiene que acatar las decisiones del Consejo de Ministros.
Independencia
La resolución de la CMT sobre el traslado está escrita con mucho cuidado y elegancia en sus formas, pero con contundencia en sus contenidos. En menos de cinco páginas, la palabra independencia se repite catorce veces y con referencia a varios conceptos, no sólo la potestad reguladora en telecomunicaciones, sino también la autonomía funcional. La CMT apela a un buen número de normas españolas y comunitarias para argumentar su autonomía del Gobierno.