McDonald's acepta pagar 6,5 millones para evitar un juicio por uso de grasas insaturadas
La cadena de comida rápida estadounidense McDonald's ha aceptado pagar unos 6,5 millones de euros (8,5 millones de dólares), para evitar un juicio por la utilización de ácidos grasos insaturados (conocidos como 'trans fat' o 'grasas trans'), y por la escasa información que reciben los consumidores sobre ese uso.
La demanda fue presentada en octubre de 2003 por la organización 'Ban Trans Fat', con sede en California, en respuesta al anuncio publicado por la cadena el año anterior acerca de la progresiva retirada de los aceites hidrogenados en la elaboración de las patatas fritas.
Desde que realizó esta declaración, McDonald's sufre dificultades para encontrar aceites alternativos a los 'trans fat', y hasta ahora sigue friendo su comida en este aceite, parcialmente hidrogenado. Los demandantes aseguran por eso que la cadena de comida rápida esta proporcionando información inexacta al consumidor.
McDonald's pagará en virtud de este acuerdo 5,4 millones de euros (7 millones de dólares) a la Asociación Americana del Corazón, que se destinarán a financiar una campaña de sensibilización a los consumidores.
Además, la compañía gastará 1,5 millones más en informar sobre el estado de sus esfuerzos para retirar los 'trans fat' de sus productos. De momento, la cadena asegura que los niveles se han reducido en un 15% en la elaboración de los productos derivados del pollo gracias al cambio de proveedores; en cuanto a las patatas, la empresa reconoce no haber cambiado nada.
Aceites fabricados
Las 'trans fat' son grasas sólidas producidas artificialmente por el calentamiento de aceites vegetales en presencia de catalizadores metálicos e hidrógeno. Se producen comercialmente en grandes cantidades para solidificar aceites vegetales y provocan un aumento del nivel de colesterol.