_
_
_
_
Farmacia

El envite logístico de Pfizer revoluciona la botica nacional

Alcobendas (Madrid), 1 de diciembre de 2004. La directora técnica farmacéutica de Pfizer España, Asunción Ramos, envía una carta a las farmacias: 'Estimado compañero, desde hace un tiempo venimos recibiendo quejas vuestras por anomalías en el aprovisionamiento de nuestros medicamentos'. Así empieza la misiva que puede originar un cisma en el sistema farmacéutico español sin precedentes y al que asisten con especial interés el resto de multinacionales farmacéuticas.

La directiva de la multinacional estadounidense asegura en su escrito que la razón del desabastecimiento se encuentra en la venta que las distribuidoras nacionales hacen de los fármacos que compran en España a otras distribuidoras que operan en países europeos con precios más altos. 'Y es por ello que, a partir del próximo mes de junio de 2005, nuestro sistema de distribución cambiará', advierte. La compañía ha abierto un concurso al que pueden asistir los operadores interesados en distribuir sus artículos.

Pfizer hace público así su intención de romper con la distribución tradicional de fármacos en España. La medida responde a una estrategia en la que la división española lleva trabajando cerca 'de cinco años', según fuentes oficiales de la empresa, y no a una imposición para el mercado europeo por parte de la matriz estadounidense.

Hay drogas que no llegan a la farmacia por el negocio paralelo, según los laboratorios

Madrid, 14 de diciembre de 2004. Cofares, la primera distribuidora española con el 18,7% de cuota del mercado, envía una carta a las boticas: 'Estimado compañero (...) queremos hacerte saber la rotunda falsedad de estas excusas de Pfizer para pretender justificar el desabastecimiento y negarse a atender nuestros pedidos', dice el consejo rector de la cooperativa. 'Cuando te visita personal de Pfizer en tu Oficina de Farmacia manipulando la realidad de los hechos y pretendiendo que van a hacerte un favor y ayudarte económicamente, debes tener claro que esto lleva muchos años consiguiéndose a través de nuestras empresas de distribución', continúa. Y acusa a la primera farmacéutica del mundo de querer 'desabastecer artificialmente al mercado -y no porque realicemos exportaciones paralelas, lo que es faltar a la verdad-'.

Cofares, que en 2003 alcanzó una facturación de 1.670 millones de euros, firmó ese mismo año un acuerdo con Pfizer por el que se comprometía a no realizar exportaciones paralelas de los medicamentos de la multinacional. El pasado viernes Cofares volvió a enviar un comunicado alertando a las farmacias de que la medida de Pfizer va encaminada hacia 'el desmantelamiento del sistema nacional de distribución'.

Quejas generalizadas de los laboratorios

El resto de multinacionales farmacéuticas que operan en España aguardan a que se dirima el enfrentamiento entre Pfizer y la distribución para iniciar medidas similares a las de la compañía estadounidense si esta tuviera éxito.

Varias de estas grandes firmas han comentado a este diario que estudiarán en ese caso seguir el camino emprendido por Pfizer. Pero por el momento prefieren permanecer en el anonimato y que sea el líder mundial del sector quien abra brecha. 'No podemos impedir el negocio paralelo, pero las distribuidoras que lo hacen saben que no tienen nuestro consentimiento', dice una de esas multinacionales. Otra añade que se trata de una práctica 'que no debería ser aceptable porque se trata de subir precios de un producto farmacéutico que está intervenido en el Estado español'. El negocio paralelo 'está produciendo situaciones de desabastecimiento', aseguran.

El perjuicio que el comercio paralelo de fármacos supone para las multinacionales es doble: por un lado pueden recibir quejas de las farmacias españolas si efectivamente sus productos no llegan a las oficinas, tal y como denuncia la mayoría de ellas. Por otro lado, si una distribuidora española vende a una inglesa, por ejemplo, la división inglesa de la multinacional farmacéutica deja de hacer negocio en su país.

La patronal ofrece alternativas

Fedifar, la patronal que reúne a las distribuidoras de medicamentos, enviará esta semana una alternativa a Pfizer. Según ha podido conocer este diario dicha propuesta se basará en el sistema de información que se proponga para que el laboratorio pueda conocer con exactitud el destino de sus fármacos.

Al igual que Fedifar otros organismos como el Colegio Farmacéutico de Madrid mantendrá contactos con Pfizer durante esta semana.

Y, mientras, operadores logísticos distintos de los tradicionales del sector farmacéutico se apresuran a presentar su propuesta de distribución a Pfizer.

Termina el plazo para acudir al concurso

El plazo inicial para presentar propuestas de distribución a Pfizer termina mañana. Grandes operadores como Seur o Logista se han interesado por este proceso. Junto a ellos también han presentado su modelo algunas distribuidoras farmacéuticas tradicionales.Según fuentes cercanas al proceso, en total entre 30 y 40 empresas se han presentado al concurso convocado por la multinacional estadounidense. La compañía, que ha contratado los servicios de una consultora internacional para coordinar el proceso, mantiene que el 1 de junio habrá cambiado el sistema de distribución actual. Posiblemente Pfizer reparta la distribución de sus drogas entre varios operadores. Las distribuidoras tradicionales advierten que Pfizer no logrará, como ellas, llegar a farmacias alejadas de los centros urbanos varias veces al día. 'Si llegan los yogures, ¿por qué no van a llegar nuestros fármacos? Nos jugamos nuestro negocio, claro que llegaremos', dicen en Pfizer.

Archivado En

_
_