Comer en el cielo de Barcelona
Cualquiera que haya viajado a Barcelona en avión en los últimos meses habrá visto, camino del aeropuerto y a orillas de la Gran Vía, la silueta de un nuevo rascacielos en el cielo. Es la torre Hesperia, un edificio de 105 metros y 26 plantas, que albergará un hotel de cinco estrellas, el segundo más alto de Barcelona después del Arts.
Por ahora es sólo el esqueleto, pero cuando se inaugure, a finales de 2006 o a principios de 2007, tendrá 280 habitaciones de lujo y un restaurante panorámico, Evo, que la gestión quiere convertir en una referencia internacional. Para conseguirlo, dos buenos atractivos. El primero es que la dirección corre a cargo del chef catalán Santi Santamaría, que es el asesor de la cadena hotelera española y posee el restaurante Santceloni en el hotel Hesperia de Madrid, catalogado con dos estrellas en la guía Michelin.
Junto a la calidad gastronómica, la otra baza para convertir el restaurante en un polo de atracción será su ubicación, que se anuncia espectacular. Estará en la cúpula acristalada y giratoria que coronará el edificio y desde la que se tendrá una visión panorámica de la ciudad con un radio de 18 kilómetros. Otro atractivo del hotel, además de estar situado a cinco kilómetros del aeropuerto, es un palacio de congresos de 5.000 metros cuadrados.
La cadena Hesperia cuenta con 40 establecimientos en España, además de dos en Bruselas, uno en Londres, uno en Andorra y dos en la Isla Margarita (Venezuela).
Diseño
Richard Rogers es el autor del diseño del rascacielos Torre Hesperia. El arquitecto, famoso por ser el autor del Centro Pompidou de París o de la Cúpula del Milenio, de Londres, es responsable también de la remodelación de la plaza de Toros de las Arenas, en la plaza España. En el proyecto de la torre colabora con el estudio Alonso, Balaguer Arquitectos Asociados. El interiorismo de las 280 habitaciones correrá a cargo de GCA.