La revolución de la televisión plana
Los españoles gastaron 1.767 millones en la compra de 3,5 millones de televisores en 2004. El ejercicio estuvo marcado por la migración de los equipos de tubo a los televisores planos. La venta de aparatos de plasma y LCD representó el 10% del total, pero su peso en la facturación fue del 40%, lo que provocó un incremento del 19,9% en los ingresos del sector.
El número de televisores vendidos el año pasado en España fue de 3,501 millones, con un crecimiento del 6,4% en relación al ejercicio precedente, según datos de los principales analistas de mercado que coinciden con los de los fabricantes. La cifra de aparatos vendidos supone la renovación de la octava parte del parque nacional, estimado en 27 millones de televisores.
El alza importante en el número de unidades vendidas no retrata fielmente la revolución que vive este sector de electrónica de ocio. Los consumidores españoles están variando de forma acelerada su decisión de compra en favor de las nuevas tecnologías de pantalla plana (plasma y LCD), en detrimento de los veteranos aparatos de tubo.
Esta tendencia se ve reflejada en la facturación del sector que se ha elevado hasta 1.767 millones de euros (IVA incluido) con un crecimiento del 19,9% en relación a la cifra de negocio de 2003.
Aunque el número de terminales planos vendidos fue de 370.000 unidades, poco más del 10% del total, frente a 3,164 millones de tecnología de tubo, el peso de los aparatos de última generación en la facturación ascendió a 40% a lo lago del año. La tendencia de cambio de tecnología asumida por los consumidores a favor de las televisiones planas se vio aún mas reforzada durante la última campaña de Navidad. Las compras de equipos de plasma y LCD supusieron el 55% de la cifra de negocio durante el pasado mes de diciembre.
El proceso de sustitución comenzó hace ya tres años, pero en 2004 se ha disparado. En el ejercicio de 2002 el 93% de la facturación del sector se realizó sobre la venta de televisores de tubo y sólo el 4% vino de las pantallas planas. El resto, un 3%, fueron proyectores profesionales. En 2003 la tecnología de tubo aportó el 82% de los ingresos del sector frente al 16% de las pantallas planas. En 2004, los nuevos televisores ya han supuesto el 40% de la cifra de ingresos.
Reparto por marcas
En todos los segmentos de negocio del mercado español el líder es Philips, que ha logrado desbancar en este puesto de privilegio a Sony, que fue el más destacado en 2003. En tecnología de tubo la empresa holandesa ha conseguido una cuota del 16,9% en 2004, frente al 16,1% de su rival japonesa. En televisores planos Philips consiguió una participación del 19,3% frente a Sony con el 15,2%. Entre los nuevos televisores, la tecnología LCD es la que más crece. Philips tiene en este segmento un 18,9%, mientras Sony está en el 8%. Las coreanas LG y Samsung y las japonesas Panasonic y JVC se disputan los puestos del tercero al sexto en todas la categorías con participaciones que oscilan entre el 6 y el 11%.
Precios más bajos, pantallas más grandes
Los precios de los nuevos televisores planos, de plasma y LCD, se redujeron un 30% en España durante 2004, según datos de los fabricantes. Las razones que justifican esta erosión son la aplicación de economías de escala por el incremento de la producción y la fuerte posición del euro en relación con la infravalorada divisa china, país en el que se fabrica un volumen importante de aparatos de nueva tecnología.Mientras los precios de los televisores planos bajan, el tamaño de sus pantallas no hace sino crecer. Así el 75% de los aparatos de plasma vendidos en Europa en 2004 fueron de 42 pulgadas o más y el 64% de los equipos de LCD tenían pantallas con más de 24 pulgadas. En contraste, sólo el 37% de los televisores de tubo tenían una pantalla de 29 pulgadas o más.Durante el ejercicio de 2004 en Europa se vendieron unos 44 millones de televisores y en el mundo unos 160 millones.