'Con los precios de referencia ahorrábamos 3,4 millones'

La consejera de Salud de Baleares asegura que los precios de referencia que el Gobierno central ha congelado eran un sistema eficaz porque han logrado frenar el crecimiento del gasto en esta autonomía

Aina Castillo prefiere insistir en que se revise el actual modelo de financiación autonómica a aventurarse a hablar de nuevas vías para financiar la Sanidad Pública. Tampoco le gusta el nuevo Plan Farmacéutico propuesto por la ministra de Sanidad Elena Salgado porque cree que 'los números son evidentes' y que el sistema de precios de referencia no estaba dando 'malos resultados'. Recuerda también que el plan de Sanidad deja sin efecto el Pacto de Estabilidad con la industria farmacéutica y suspende los precios de referencia.

Pregunta ¿Cuál será el impacto de la suspensión de los precios de referencia en Baleares?

Respuesta Hemos reducido el crecimiento del gasto en un 4 % en 2004 gracias a los precios de referencia. Ahora, tengo una gran preocupación por lo que va a ocurrir porque hemos encargado varios estudios que indican que Baleares dejará de ahorrar 3,4 millones de euros si deja de aplicar ese sistema.

'El déficit sanitario entre 2002 y 2004 asciende a 245 millones de euros'

P Recientemente, el ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha reiterado su idea de ampliar la recaudación de las comunidades para resolver el déficit sanitario, ¿qué le parece esta fórmula?

R De todo podemos hablar, pero lo primero que tiene que hacer el Estado es revisar nuestra financiación porque cumplimos el parámetro del artículo 67 de la Ley de Financiación Autonómica. Nuestra población ha crecido un 16%, y, según la legislación vigente, tenemos derecho a revisar nuestra financiación. Considero que antes de hacer recaer en los ciudadanos una carga económica que no les corresponde, el Estado debe hacer los deberes.

P ¿Ha conseguido que el Estado le valore adecuadamente los sobrecostes de vivir en una isla?

R No, ni mucho menos. Nosotros tenemos costes muy importantes derivados de la insularidad. Por ejemplo, tenemos una población de 3.000 habitantes en Formentera y tenemos que construir un hospital. En una población con pocos habitantes no se construye un hospital si no es porque se trata de una isla. Tenemos que desplazar enfermos desde Menorca, desde Ibiza o desde Formentera al centro de referencia que está en Palma de Mallorca. El viaje en avión y el alojamiento son gastos que otras comunidades no tienen. Al año hay unos 26.000 traslados que nos suponen tres millones de euros. Además, tenemos calculada la cifra total, pero, independientemente de que nos den o no por buena esa cifra, lo importante es que se cree la comisión mixta del Régimen Especial Balear que no termina de constituirse.

P Al llegar usted a la consejería el déficit era de 140 millones de euros. ¿Cuál es la situación actual?

R Tenemos un déficit sanitario importante, aunque en 2005 el Parlamento balear aprobó un presupuesto que supone un incremento del 40%. El déficit acumulado desde 2002 al 2004 asciende a 245 millones de euros y existe porque no hemos recibido ninguna compensación.