Usuarios adictos al pago con dinero de plástico
Un pequeño grupo de clientes acapara la mitad del gasto con tarjetas
Con tarjeta o efectivo? El 18% de los españoles lo tiene claro. Pertenece al grupo sociológico de los adictos al pago con dinero de plástico, con alto poder adquisitivo y sin hijos a cargo, que no sabe lo que es llevar billetes en el bolsillo. Son los llamados heavy spenders (grandes gastadores) en la jerga financiera. Acumulan el 53% del gasto total con dinero de plástico.
En realidad no gastan tanto, a juzgar por las cifras que les asignan los expertos en medios de pago. Engloban en esta nueva tribu socio-económica a aquellos que abonan más de 500 euros al mes con tarjeta. Así consta en un estudio del sector del año pasado no publicado y basado en encuestas a consumidores. Pero esta cuantía tiene que ver con la cultura monetaria que tiene España, uno de los países europeos con más tarjetas por habitante (1,4), pero de los que menos las usa.
'Vemos signos de que los hábitos se van modificando y en los próximos años veremos crecimientos muy fuertes en tarjetas', afirma José Sirvent, director general de Mastercard Iberia.
El 11% de los españoles no tiene tarjeta de débito ni de crédito
De momento, el 11% de la población no tiene tarjeta, ni de débito ni de crédito. La mayoría, el 41% son poco adictos a la tarjeta (gastadores ligeros), con una factura de menos de 100 euros al mes. Y el 30%, gastadores moderados, con una horquilla de entre 100 y 499 euros.
'El efectivo es el enemigo a batir en el negocio de tarjetas', señala Antonio de Andrés, responsable de medios de pago de la CECA. Y para respaldarlo, otro dato, en un periodo de tres meses sólo el 50% de 1.200 encuestados tipo reconoce haber pagado con tarjeta de débito. El crédito puro (llamado revolving) está aún en zona de despegue con un 8% de adeptos, según datos recabados en diciembre de 2003. Aunque 'en los últimos dos años se ha duplicado la demanda', apunta Luis García Cristóbal, director general de Visa Europe en España, y añade que uno de los retos del mercado se ha superado porque 'el gasto en comercio y en cajeros están casi igualados al 50%'.
¿Qué se compra con tarjeta? La prioridad, ropa y calzado. Pero el gasto más frecuente es la alimentación, luego la gasolina y, sorprendentemente, en tercer lugar, las copas en pubs y bares.
Lo curioso son los hábitos de los consumidores según el tipo de familia. Los solteros (singles), los young nesters (de nido joven, es decir, parejas con hijos menores de cinco años), mature nesters (de nido maduro, adultos con hijos mayores de cinco años) y empty nesters (de nido vacío, personas sin hijos a cargos). Así, los solteros son los más perezosos a la hora de tener una tarjeta, y no digamos si es de crédito. Pero cuando usan alguna suelen comprar más comida rápida, más entradas de cine y alquilan más películas de vídeo.
El gasto cambia completamente en las personas con hijos, que recurren más al dinero de plástico para adquirir muebles y grandes electrodomésticos. Dentro de este grupo, los jóvenes con hijos pequeños son grandes aficionados al pago con tarjeta.
Pero son los españoles sin hijos a cargo los verdaderos heavy spenders, los que sustentan el rendimiento en comisiones que logran bancos y cajas gracias a las tarjetas. Y cuando gastan rompen la media de pago a crédito (120 euros mensuales) con una marca de 145,30 euros. Un lujo de cliente para la banca.
Cómo son y en qué gastan
Desafortunadamente para la banca, el grupo de los solteros es el mayoritario en España. Uno de cada cuatro. Y es que el grupo, de los cuatro identificados en el estudio elaborado por una prestigiosa entidad del sector de medios de pago, se distingue por ser usuario de tarjetas de perfil bajo. La mitad sólo utiliza las de débito. Y gasta menos que los otros en alimentación, supermercados, gastos regulares y farmacia.Las personas con hijos pequeños son los más propensos a tener todo tipo de tarjetas. Se atreven más con el revolving, que supone pagar un interés mensual. Sólo por esto son el sueño de cualquier director de oficina financiera. Suponen el 15% de la población y tienden a un gasto moderado, aunque a veces con excesos. La compra preferida: grandes caprichos para amueblar la casa y aparatos electrónicos, a la última.Los españoles ya no tan jóvenes con hijos de más de cinco años siguen el patrón lógico de compras. Son los que más compran en supermercados, gastan en ropa y calzado, en pagos regulares de la casa y en productos farmacéuticos. Son el 25% de la población y usan el crédito, pero menos que el grupo anterior. Se muestran más reacios que otros a comprar en internet y destinan menos a ocio.Liberados de hijos, este grupo de adultos se lanza a pagar con tarjeta con mucho menos remordimiento que los anteriores. Así se llevan la palma como gastadores de pro y son los más mimados por las entidades financieras. Pero son pocos. Sólo un adulto de cada diez está en este grupo. Derrochar en ocio no les preocupa y, de hecho, son los que más pagan en restaurantes, hoteles y líneas aéreas.