La operadora acepta las condiciones de Chile y compra la filial de Bellsouth

Telefónica Móviles recibió el martes pasado el veredicto de las autoridades de competencia chilenas sobre la compra de la filial de Bellsouth en el país. El tribunal aprobó la adquisición, pero impuso nueve condiciones para que fuera posible. Y en un plazo muy breve de tiempo la compañía española las ha estudiado, ha evaluado su repercusión y las ha aceptado. Bellsouth Chile es desde el viernes propiedad de Telefónica Móviles, que ese mismo día asumió la gestión de estos activos.

Al igual que en el resto de países, Bellsouth Chile conservará su marca y sistemas comerciales durante un periodo transitorio, hasta que concluyan los trabajos de integración de sus plataformas comerciales con los de Telefónica Móviles.

Con la compra de la filial chilena, Telefónica cierra la novena adquisición de las diez que contemplaba el acuerdo global firmado con Bellsouth para la toma de sus filiales latinoamericanas. Ahora sólo queda por cerrar la operación en Argentina, que cuenta con el visto bueno ya de las autoridades que regulan la competencia en ese país.

La adquisición chilena se ha cerrado a un valor empresa de 532 millones de dólares, lo que lleva el acumulado de todas las compras realizadas hasta ahora a 4.862 millones de dólares.

La suma de Telefónica y Bellsouth en Chile dará lugar a la creación del líder del país, con 4,7 millones de clientes a cierre de 2004. Esta número de usuarios da idea del crecimiento experimentado por estas compañías en el último año, ya que a finales de 2003 contaba conjuntamente con 3,571 millones de consumidores. Bellsouth Chile aporta 1,43 millones a la suma.

Ahora, Telefónica Móviles tendrá que integrar la filial de Bellsouth y también cumplir las condiciones impuestas por Chile para la adquisición. Una de las imposiciones pasa por vender espectro, lo que podría dar entrada a un nuevo competidor en el mercado. En estos momentos, Móviles pasa a ser el líder, seguido de Entel -filial de Telecom Italia-, mientras que la participada de Endesa -Smartcom- tiene una cuota muy limitada.

Otro de los requisitos de la fusión es aplicar la misma tarifa a las llamadas que se produce dentro de su red a las que se hacen con el exterior.