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Telecomunicaciones

Telefónica acusa a México de poner trabas a su crecimiento

Telefónica Móviles ha emprendido una carrera contrarreloj para forzar un cambio en la decisión de las autoridades mexicanas de limitar su participación en la subasta de frecuencias de móvil. El tiempo se agota el lunes y la operadora acusa al Gobierno de discriminación.

La relación entre Telefónica Móviles y los reguladores mexicanos no ha sido siempre plácida, sobre todo por la dificultad de asentarse en un mercado dominado durante años por una sola compañía -América Móviles, respaldada por el magnate Carlos Slim- y con muy poca competencia.

Pero esta relación se ha tornado ahora en conflicto abierto. La culpa ha sido de la decisión del organismo de la competencia de limitar las posibilidades de Móviles de participar en la subasta que, a partir del lunes, pone a la venta espectro radioeléctrico, el bien más preciado de las operadoras celulares.

Móviles no se ha quedado parada y ha criticado abiertamente la situación. A su juicio, esta actuación atenta contra la competencia y 'pretende limitar la participación' de la empresa en el mercado, según aseguró en un comunicado.

Una primera decisión abrió la puja a todas las compañías que quisieran, pero la Comisión Federal de la Competencia ha cambiado el escenario y ha recortado los derechos de participar de Telefónica Móviles.

Este organismo ha apelado a la necesidad de velar por la competencia para limitar a 35 megahercios la capacidad máxima que puede tener una operadora para presentarse a la subasta. El problema es que para ello no ha sumado las dos bandas de frecuencias que existen -850 y 1900 megahercios-, sino que sólo computa esta última. Y éste es, precisamente, el problema para Telefónica, ya que la operadora sólo posee espectro en esta banda. Así, ha quedado descartada de la puja en cinco de las nueve regiones en las que se divide la subasta. Mientras, otras empresas que, en conjunto, tienen más capacidad pero repartida en las dos bandas sí pueden presentarse.

El resultado es que una casi recién llegada al mercado ve limitada su capacidad, mientras que América Móviles -que opera con el nombre de Telcel en México- podrá acudir a más subastas, pese a tener el 80% de los clientes.

Los próximos pasos de Telefónica Móviles se guardan todavía en secreto, pero la compañía aseguró ayer que estudiará todas las posibilidades para defender sus intereses y cambiar la decisión de Competencia, incluido el recurso a los tribunales.

Móviles recibe ofertas de compra en Suiza

México no es la única nación en la que Telefónica Móviles tiene problemas con las autoridades. También Suiza se ha tornado conflictiva.El país ha abierto una investigación para constatar el grado de cumplimiento de las condiciones de la licencia UMTS de la empresa española. Puesto en Móviles renunció en 2002 a desplegar esta tecnología en ningún mercado que no fuera España, el resultado es bastante predecible. El problema real es que Suiza es uno de los países, igual que Alemania, donde todavía no se permite negociar con el espectro, mientras que el objetivo de Telefónica es vender la empresa a otra compañía. Fuentes conocedoras de la situación aseguran que la española ha recibido ofertas de compra por su filial suiza y que así se lo ha comunicado a las autoridades. La venta resolvería el problema, pero Suiza parece reacia a adaptar la ley.

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