Los agricultores ganan el 50% más que en 1990
La renta media generada por los agricultores españoles en 2004 supera en un 50% la cosechada hace 14 años. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) publicó ayer un avance que sitúa la renta agraria total en 2004 en el entorno de los 27.000 millones de euros. Esta cantidad supera en un 3,7% la registrada el año pasado, aunque, una vez descontado el 3,8% del índice deflactor del PIB, queda una mínima caída del 0,1%. Se trataría de un retroceso, en todo caso, de no ser porque se ha reducido ostensiblemente el número total de horas trabajadas en la agricultura en nuestro país. Las unidades de trabajo-año (UTA) representan el trabajo realizado por una persona a tiempo completo durante un año. En el año que termina se han contabilizado 962.000 UTA (es decir, trabajan poco menos de un millón de personas en la agricultura y la ganadería), un 1,8% menos que en 2003. Así, la renta agraria generada por cada UTA supera ya los 28.000 euros. Si se utilizan precios constantes de 1990, los 15.920 millones generados en 2004 superan en un 48,8% la cifra de aquel año.
El primer avance de macromagnitudes agrarias de 2004 publicado por el MAPA ha sido entregado también a la oficina estadística de la Unión Europea, Eurostat, que realiza las comparaciones entre Estados miembros. La subida del 1,7% de la renta agrícola media en España se sitúa por debajo de la cosechada por el conjunto de la UE (3,3% de media), pero por encima del 0,8% de los 15 países que formaban la Unión antes de la ampliación a Estados con mayor peso del sector primario. Entre los mediterráneos, el mejor ha sido Grecia, con una subida del 2,8%. Por detrás de España quedan Italia (1,3%), Portugal (0,6%) y Francia (-3,7%).
Tanto el valor de la producción vegetal como el de la animal han crecido un 5,4% en 2004, aunque de forma distinta: la agraria creció un 8,8% en cantidad, pero el precio se redujo un 3,1%; en cambio, la producción animal mejoró de forma moderada tanto en cantidad como en precio (2,6% y 2,7%, respectivamente). La producción de servicios se redujo un mínimo 0,3% en cantidad, pero su precio subió un 0,6%, lo que lleva a un aumento de valor del 0,3%. En cuanto al epígrafe 'actividades secundarias no agrarias no separables', el aumento de valor del 6,8% lleva su importe total a 1.311 millones.
Los consumos intermedios (cantidad que se sustrae al valor de la producción para hallar el valor añadido de la agricultura) crecieron un 7,4%, sobre todo por el aumento medio de precios del 4,8%. En este epígrafe destacan las subidas de los precios de la energía y lubricantes consumidos (9,4%), de los piensos (5,3%) y del mantenimiento del material (5,8%). En valores absolutos, sobre un total de 14.165 millones de euros, los insumos que más cuestan a los agricultores son los piensos, con 6.388 millones, seguidos de energía y lubricantes (1.133 millones), mantenimiento de material (1.135), fertilizantes y enmiendas (1.120) y productos fitosanitarios (1.012).
Uno de los capítulos que más han crecido en 2004 entre los aminoradores de la renta agraria es el de las amortizaciones: los 3.550 millones dedicados a afrontar la pérdida de valor de inmuebles y maquinaria representan una subida del 8% respecto a 2003.
Aceite y cereales, más a menor precio
La mayor subida porcentual en producción ha sido el aceite de oliva, con un 63,2%, aunque su precio cayó un 13,9% en 2004.La producción de cereales aumentó un 23%, con una leva bajada del precio (1,2%).El descenso más importante en términos de producción fue el de las frutas, un 10,5% menos, aunque su precio se mantuvo estable (0,2% más).En ganadería destaca el aumento del precio de la carne de porcino (8,1% más)
La participación de las subvenciones disminuye
El capítulo de las subvenciones mantiene una importancia capital en el campo español: los 6.437 millones de euros por aportaciones públicas suponen el 23,8% de la renta agrícola. El montante nominal de las subvenciones dadas en 2004 supera en 80 millones de euros el registrado en 2003.Sin embargo, atendiendo a los datos avanzados ayer por el MAPA, la participación de las subvenciones sobre el conjunto de la renta agraria ha caído cuatro décimas: en 2003 suponía un 24,2% de la renta total, y se estima que en 2004 quede en el 23,8%. El sector que más subvenciones recibe es el del cultivo de cereales (1.410 millones de euros), que además ha cosechado este año el mayor incremento, con un 10,4%. El siguiente grupo con más ayudas es el aceite de oliva, con 950 millones de euros, aunque un 3,6% menos que en 2003. En el otro extremo quedan las plantas industriales, que reciben un 9,1% menos que en 2003, para quedarse en 525 millones de euros. En el ámbito de la ganadería, el ganado bovino recibe un 1,4% más, hasta los 475 millones, y el ovino y caprino, un 0,7% de aumento, hasta los 388 millones. El conjunto de subvenciones a los productos queda en 3.851 millones de euros, un 1,6% más que el año pasado. Las subvenciones por otros conceptos aumentan el doble, un 3,2%, hasta situarse en 2.585 millones.El avance del epígrafe 'otras subvenciones' en detrimento de las ayudas directas a la producción concuerda con la inminente reforma de la Política Agrícola Común (PAC), el campo de actuación más costoso de la Unión Europea: este año se otorgaron ayudas públicas por valor de 44.300 millones de euros en el conjunto de los países miembros. La progresiva reducción de las subvenciones a la agricultura será una realidad imparable desde que el 1 de enero entre en vigor la reforma. Las ayudas públicas se concederán, a partir de esa fecha, en función del respeto al medio ambiente y la sostenibilidad, y no de la producción.