La policía fiscal rusa registra la sede central de Yukos en Moscú
La policía fiscal rusa ha registrado hoy las oficinas centrales de la petrolera Yukos en Moscú coincidiendo con la vista del recurso presentado por la compañía ante un tribunal de Estados Unidos, anunció la Fiscalía General de Rusia.
"Este registro se enmarca en el actual proceso judicial contra Yukos. En estos momentos, tiene lugar el interrogatorio del jefe de personal de la petrolera, Antón Sajarov", ha señalado un portavoz de la Fiscalía rusa, citado por la agencia Interfax.
El director financiero de Yukos, Bruce Misamore, ha denunciado hoy desde Houston, ciudad de EEUU donde el consejo de dirección de la compañía interpuso el recurso, que la Fiscalía rusa registra tanto el departamento de personal como el financiero y jurídico.
Según el portavoz de la Fiscalía, la policía ha negado a Sajarov el derecho a ponerse en contacto con su abogado. Misamore ha denunciado también desde EEUU que este registro es una medida de represalia del gobierno y que el Kremlin pretende su extradición y la de otros directores residentes en Gran Bretaña.
El consejo de dirección de Yukos abandonó el mes pasado Rusia en pleno tras el encarcelamiento de varios de sus gerentes y la persecución de los asesores legales de la compañía. En concreto, el abogado de Yukos, Dimitri Gololovov, es buscado por la justicia rusa, razón por la que se ha afincado en Londres.
Evitar la venta de su filial
Yukos intenta evitar la venta el 19 de diciembre de su principal filial, Yuganskneftegaz, que aportó el pasado año el 62% de la producción total de crudo de la compañía, en una subasta convocada por el fisco para cubrir las deudas de la petrolera, que rondan los 28.000 millones de dólares.
El Tribunal de Arbitraje de Moscú ha confirmado hoy la legalidad de la reclamación fiscal por valor de 6.900 millones de dólares contra la petrolera en concepto de evasión de impuestos por el año 2002.
Tras las nuevas reclamaciones presentadas la pasada semana, Yuganskneftegaz adeuda al Estado ruso 5.100 millones de dólares y, según la agencia Finmarket, para el día de la subasta sus deudas podrían totalizar unos 7.800 millones de dólares.