Los planes de Sacyr sobre el BBVA llevan a Abelló a dimitir como consejero del Santander
El Consejo de Administración de Sacyr ha acordado ampliar en un mes el plazo concedido a su presidente, Luis del Rivero, para continuar con su proyecto de hacerse con el 3,1% del BBVA y de entrar en el Consejo de Administración. la primera consecuencia ha sido la dimisión del vicepresidente segundo de la constructora, Juan Abelló, como consejero del Grupo Santander.
En caso de seguir adelante con la operación, el actual vicepresidente segundo de la constructora, el financiero Juan Abelló, debía dimitir como consejero del Grupo Santander, cosa que ha realizado hoy mismo a través de una carta remitida al presidente del grupo financiero, Emilio Botín. En ella, Abelló explica la imposibilidad de seguir perteneciendo al Consejo del Santander, una vez que la constructora ha decidido continuar con la operación para adquirir el 3,1% del BBVA. "Como comprenderás, en esas condiciones, me es imposible seguir siendo miembro del Consejo de Administración del BSCH. Por ello presento mi renuncia irrevocable a dicho cargo", añade.
a salida de Abelló del grupo Santander se produce una vez que el financiero hubiera recibido múltiples críticas por su participación directa en la operación de toma de control de BBVA, junto con la constructora Sacyr. Ayer mismo, desde el Grupo Santander se hizo público un informe en el que valoraba negativamente las intenciones de la quinta constructora sobre el BBVA, cuya razón de ser sólo podía venir motivada "por las ambiciones personales" de los directivos de Sacyr-Vallehermoso.
Juan Abelló pretende junto a Demetrio Carceller -otro accionista de Sacyr- entrar en el accionariado de BBVA, con cerca de un 0,47% de su capital, al que se uniría el 3,1% que pretende adquirir la constructora en la citada operación.
Compromiso de mantener al presidente
A través de sendos comunicados a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y a los medios de comunicación, Sacyr también se compromete a, en el caso de que la operación finalmente prospere, mantener al actual equipo directivo y a su presidente, Francisco González.
El grupo constructor asegura en sus comunicados que esta operación es una "iniciativa propia" y "puramente empresarial", "en el marco de una economía libre y de mercado y desde el máximo respeto a la legislación vigente y a las normas del buen gobierno corporativo". Según el grupo constructor, su intención de convertirse en el máximo accionista del segundo banco español busca favorecer a los accionistas, empleados y clientes de ambas sociedades e incrementar su valor bursátil.
Además, Sacyr asegura que pretende reforzar la presencia en España y Europa del BBVA -"entidad clave en el sistema financiero español"-, manteniendo al actual equipo ejecutivo de la entidad, "que ha demostrado su sobrada capacidad profesional".
La entrada de Sacyr en el BBVA beneficiará, en opinión del grupo constructor, al Consejo de Administración de la entidad bancaria, porque le proveerá de "un núcleo de accionistas solventes que dote de estabilidad a su capital".
La operación, que según Sacyr también es positiva para "el conjunto de la economía del país", se llevaría a cabo mediante una ampliación de capital por 1.100 millones de euros. Si fuera necesario para completar la suscripción, está previsto que se cubran al menos 700 millones de euros (un 0,5 por ciento adicional) por parte de miembros del consejo, concretamente de sus accionistas Juan Abelló y Demetrio Carceller.