TeliaSonera dedica 380 millones a amortizar su ruinosa red internacional
Ayer no fue un buen día para la operadora nórdica TeliaSonera y menos para sus accionistas. La compañía anunció por la mañana un profundo saneamiento de sus activos internacionales ( cuenta con una red propia), con el objetivo de adaptarse a las nuevas normas de contabilidad. El resultado será un cargo extraordinario de 380 millones de euros, que computará en los resultados del cuarto trimestre.
La principal afectada es la filial que gestiona la red internacional de la operadora, cuyo valor se ha dejado a cero en el balance, tras continuas pérdidas.
La razón de esta limpieza está en las 'duras condiciones operativas del mercado' y en la continua 'caída de los precios', aseguraron los ejecutivos de la firma. Todo ello 'hace difícil mejorar la rentabilidad hasta un nivel que nos permita defender su valor en libros'.
Además del saneamiento, otra noticia sacudió la cotización de TeliaSonera, hasta provocar una caída del 4,16%. El Gobierno finlandés anunció que venderá acciones de la operadora por valor de 1.350 millones de euros, con el consiguiente efecto dilutivo para los actuales socios que tienen este tipo de emisiones.
La venta se fundamenta en la necesidad de fondos que tiene Finlandia para reducir su deuda y supondrá la salida al mercado de, al menos, 250 millones de acciones. Después de la desinversión, el país se quedará con cerca del 13% del capital. Suecia tiene el 45%.