La sucesión en EADS enturbia las relaciones francoalemanas
La lucha de poder en la cúpula del gigante aeronáutico y de defensa europeo EADS, cuyas acciones cayeron ayer un 1,5%, ha creado cierto clima de desconfianza en el tándem francoalemán, considerado hasta hoy como ejemplo de cooperación industrial europea.
La intención de la parte francesa, en concreto atribuida al actual presidente de Airbus, Noël Forgeard, de poner fin a la doble presidencia francoalemana que dirige el grupo desde el año 2000, ha levantado vivas críticas en el país vecino. Y se ha cobrado su primera víctima.
El copresidente alemán del grupo europeo, Rainer Hertrich, anunció el pasado sábado su marcha del cargo a mediados de 2005, un gesto que en Francia ha sido interpretado como una forma de cerrar el debate sobre el fin de una presidencia bicéfala.
El gesto deja ahora la pelota en el campo galo, que debe decidir si mantener a Philippe Camus, actual copresidente francés, o alzar al decidido Forgeard.
EADS está participada en algo más del 30 % por el grupo germano-estadounidense DaimlerChrysler y en un 15%, respectivamente, por el Estado francés y el consorcio galo Lagadère. La SEPI controla otro 5,6 %, mientras que el resto cotiza libremente en Bolsa.
Según ha publicado el diario francés La Tribune, Lagardère habría optado por Noël Forgeard como copresidente galo, no sin la injerencia del Jefe del Estado, Jacques Chirac.
El Secretario de Economía del Gobierno alemán, Ditmar Staffelt, apelaba ayer de forma discreta a mantener el equilibrio de intereses entre ambos países. 'Nuestra apuesta es un grupo europeo armamentístico que pueda mantener la paz junto con Estados Unidos, no sólo en el sector aeroespacial, sino también en el militar', dijo.
Sin embargo, otras voces de la política alemana son mucho menos diplomáticas. Johannes Singhammer, diputado de la oposición, no dudó en instar al Gobierno germano a no arredrarse. 'EADS y Airbus no son las joyas de la corona francesa. Los empleos de EADS no están al servicio de la política industrial nacional francesa', dijo el político alemán.