Un ex presidente del Banco Mundial reclama más gasto en salud para los pobres
El ex presidente del Banco Mundial, Robert McNamara, ha pedido un mayor esfuerzo de los países ricos para conseguir los llamados Objetivos de Desarrollo del Milenio. El objetivo marcado por Naciones Unidas de que los países destinen el 0,7% por ciento de su PIB no parece en la actualidad una meta realista. McNamara remarcó que Estados Unidos únicamente destina un 0,1% de su PIB al desarrollo de las naciones más desfavorecidas y que sus previsiones son de aumentar la cifra al 2%. 'No sólo es insuficiente sino que no se emplea correctamente', apunta.
Los objetivos de desarrollo suponen que las naciones más avanzadas destinen al menos un 4% de su PIB, con los que, según McNamara, se podría reducir la pobreza a la mitad, el hambre en un 30%, la mortalidad infantil en dos terceras partes y el sida en un tercio para 2015, aunque para conseguirlo se ha de mejorar cómo se emplean los fondos. La clave para McNamara, que participó ayer en el 25 Aniversario de la Fundación Novartis para el Desarrollo Sostenible, es anteponerlo como una prioridad política y económica.
'La salud es el principal problema de desarrollo', apunta el director de esta fundación, Klaus Leisinger, quien reclama una acción conjunta para afrontar el problema. Respecto al sector privado, señala que puede aportar más cosas que dinero, como es el término de costeefectividad. 'Se ha de pensar en el desarrollo también en términos de cual es el retorno de la inversión y seguir los ejemplos de países como Costa Rica o Sri Lanka, con un nivel muy bajo de renta per capita pero con un alto nivel de alfabetización y un índice de mortalidad muy bajo. En cuanto al sector farmacéutico, remarca que hacer disponibles los medicamentos esenciales no es el único camino: 'es necesario una educación para que el paciente siga adecuadamente el tratamiento y una infraestructura sanitaria que permita hacer seguimiento del paciente. Si no, de nada sirve con hacer accesibles los fármacos'.