La integración del Atlántico y el Sabadell, una carrera contrarreloj
Al centro de datos del Banco Atlántico le quedan cuatro días de vida. El próximo lunes, y si se cumple todo lo planificado, el ordenador central de esta entidad financiera dejará de funcionar, y eso supondrá que la integración tecnológica y operativa del Banco Sabadell y del Atlántico habrá acabado con éxito, tras la opa que lanzara el primero sobre el segundo en diciembre de 2003. Incluso habrá marcado un hito en la banca europea al concluir dicho proceso en tan sólo nueve meses, ya que la operación de compra se cerró el 26 de marzo.
El 6 de diciembre será el día D. Pese a ser fiesta nacional, no será un día relajado para los directivos ni técnicos del nuevo grupo. Ese día se cerrarán locales, se fusionarán alrededor de 80 oficinas y se culminará la migración de todas las aplicaciones informáticas.
Entre los días 5 y el 6 -porque necesitan una ventana de 48 horas para hacer toda la migración de datos- vaciarán saldo a saldo, registro a registro los sistemas del Atlántico para cargarlos en la aplicación del grupo. Y no sólo los saldos actuales sino los movimientos históricos y todo sin que dejen de cuadrar las masas contables que había hasta entonces.
'Nuestros proveedores estarán de guardia por si hay alguna contingencia'
'Hemos hecho cinco ciclos de pruebas, y tras el último hemos establecido una zona congelada de software. Es decir, nadie está haciendo ninguna variación del software que hemos probado'. cuenta Miquel Montes, director general adjunto de operaciones y tecnología. Según Montes, en esas pruebas han llegado a un nivel de certidumbre muy alto de que 'sabemos reconstruir los saldos tras quitar los movimientos a las cuentas y cuadrarlo contablemente'.
Pese a que el Sabadell tiene una nutrida experiencia en operaciones similares, (no quedan tan lejos las integraciones de Banco de Asturias, Solbank, Banco Herrero y Activobank), que les ha permitido afrontar esta nueva integración con la serenidad de la lección aprendida, los escenarios que contempla para el día 6 también incluyen errores.
'Si salen bien las cosas, será como inaugurar un pantano: cortaremos la cinta y brindaremos', continúa Montes. 'Pero puede ocurrir un error de hardware o un problema de potencia eléctrica, aunque para todo este tipo de contingencias tenemos previsión. Además de la habitual redundancia de los elementos críticos, hemos establecido cadenas logísticas con los proveedores que estarán en guardia esos dos días por si hubiera que hacer alguna intervención'. El directivo señala que juegan a favor con un exceso de horas de ejecución. 'Pero si fuéramos retrasados, hay un punto horario en el que hay que tomar la decisión de no seguir adelante. Es decir, de abortar el movimiento, porque es el punto a partir del cual no seríamos capaces de volver a dejar la situación en el Banco Atlántico como estaba para que el martes 7 funcionara como antes'.
Lo que ocurra finalmente no se sabrá hasta el día después, pero hasta entonces los directivos del banco, los empleados y sus proveedores tecnológicos habrán participado de una carrera contrarreloj. En otoño han hecho el cambio de marca en todas las oficinas; desde abril las aplicaciones del Atlántico se ejecutan en una extensión del ordenador del Sabadell, tras redirigir las telecomunicaciones de un centro a otro; durante el verano cambiaron alrededor de 3.000 equipos informáticos (sobre todo PC y servidores, que compraron a HP); han modificado toda la electrónica de red en las oficinas del Atlántico, y han impartido 80.000 horas de formación a distancia y otras 30.000 presenciales.
El día 6 acabará un trabajo que ha sido de alrededor de 180 años/persona, 'que es lo que nos ha costado hacer los programas de descarga de los datos de los sistemas del banco Atlántico, de carga en los sistemas del Sabadell, más la actualización de algunas funcionalidades que tenía el Atlántico y que hemos decidido incorporar al banco Sabadell, como la de gestión discrecional de fondos', añade Montes, quien asegura que pese a ese esfuerzo sólo han tocado el 10% de los programas del Sabadell, unos 5.000.
Coste
El coste de integración ha ascendido a 12,4 millones de euros, pero a cambio, 'vamos a ahorrarnos un 68% de lo que el Atlántico gastaba en tecnología, ya que el coste tecnológico que tenía este banco en 2003 el año próximo significará un coste incremental sobre el coste del Sabadell del 32%, por las sinergias'. El presupuesto tecnológico del Grupo Banco Sabadell para 2005 será de 98 millones. Los proveedores que trabajan con la entidad fusionada son IBM, Telefónica, Accenture, Steria, HP, Bull y Sun. Atos Origin Y Getronics, proveedores del antiguo Atlántico se han quedado fuera, 'pero no descartamos que puedan participar con nosotros en el futuro'.