Trichet no evita que el euro vuelva a máximos
Cuando la semana parecía encauzarse para la moneda única camino de la tranquilidad, el euro ha vuelto hoy a marcar un nuevo valor récord histórico en 1,3336 dólares. Y eso pese a que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, ha reiterado que la actual subida de la moneda única europea es "indeseada".
En la apertura, el euro bajaba hoy en el mercado de divisas de Francfort, y se cambiaba en torno a los 1,327 dólares, frente a los 1,3282 a los que cerró ayer por la tarde. Sin embargo, la tendencia ha virado. El anémico crecimiento de la economía de la zona euro tampoco ha impedido que la divisa comunitaria reiniciara hoy su carrera alcista frente al dólar tras una jornada de consolidación.
Trichet se ha mostrado cauteloso en Bruselas respecto a las perspectivas de recuperación económica en los doce países que comparten el euro. "La dinámica de crecimiento se ha debilitado en la segunda mitad del año", ha señalado Trichet, quien ha pronosticado una aceleración de la actividad económica en el tercer trimestre del 0,3%, frente al trimestre anterior.
En su comparecencia ante el Comité de Asuntos Económicos y Monetarios en el Parlamento Europeo, el banquero galo ha pronosticado un crecimiento económico del 2% para el próximo año en la eurozona y consideró que se dan las condiciones para ello pese al elevado precio del petróleo.
Trichet mostró ayer su preocupación por el alza sin control del euro, dejando claro que sus efectos sobre las exportaciones europeas son nefastos, e instó a EE UU, en una respuesta a un parlamentario europeo, a que reduzca su déficit por cuenta corriente y a que intervenga para detener la caída del dólar.
Tipos sin cambios
Según los expertos, el consejo de gobierno del BCE mantendrá inalterado el precio del dinero en el actual 2% en su reunión del próximo jueves. Añaden que la rápida revalorización del euro puede hacer tambalear el marco de referencia del análisis monetario ya que, por un lado, perjudica a las exportaciones de la zona euro, lo que puede ralentizar el crecimiento del área pero, por otro, compensa los efectos inflacionistas del elevado precio del petróleo, que se paga en dólares.
Algunos operadores en los mercados de divisas creen que la actual carrera alcista del euro es imparable, mientras que otros opinan que pronto habrá una reacción a la debilidad del dólar, que invertirá la tendencia actual.
Los expertos señalan que EE UU necesita un dólar débil para financiar su elevado déficit y, en algunos casos, dudan de la capacidad de la economía estadounidense para hacerse cargo del endeudamiento público.