El Gobierno insta a las telefónicas a rebajar los precios del ADSL
El Gobierno ha mediado en la polémica por los precios del ADSL, muy elevados en comparación con la media europea. El secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros, aseguró ayer que el Ministerio de Industria ha instado a las operadoras a que rebajen las tarifas para así expandir el mercado.
El responsable de telecomunicaciones del Ministerio de Industria no citó expresamente a Telefónica, pero es ella la que determina la factura de la banda ancha en España. En primer lugar, porque es la dueña del mayor porcentaje de clientes y, en segundo, porque es la que fija la tarifa de la oferta mayorista, aquella que le compra el resto de los operadores para luego revenderlos al cliente final.
Los competidores de Telefónica, por tanto, sitúan sus precios en el margen que les queda entre lo que el ex monopolio les cobra a ellos y lo que factura a los clientes. Sólo las compañías que están invirtiendo en red y en instalar equipos en las centrales de Telefónica, así como las operadoras de cable, pueden liberarse de esta horquilla y tienen algo más de capacidad para reducir tarifas.
En todo caso, el llamamiento a la rebaja de precios cobra especial importancia porque es la primera vez que desde el Gobierno conmina a las telefónicas a abaratar el ADSL. El objetivo de esta reducción, según Ros, sería 'expandir el mercado', puesto que en este campo la competencia 'no está del todo desarrollada'.
El secretario de Estado explicó que 'se ha incentivado verbalmente' a las operadoras para que 'prueben a hacer el experimento' de bajar precios. La mayor agresividad en las políticas de tarifas reportaría un mayor nivel de ingresos a las compañías 'como ya ha ocurrido en otros países europeos'.
Ros también hizo un repaso al resto de los mercados y opinó que el nivel de competencia en telecomunicaciones, más allá del ADSL, es suficiente para que se produzca una correcta formación de tarifas, especialmente en la telefonía móvil.
A este respecto, Ros subrayó que es 'difícil' encontrar otro país europeo 'que tenga tres compañías de móviles tan relativamente potentes como las que hay aquí' (Telefónica Móviles, Vodafone y Amena).
Ros añadió que España dispone de unas tarifas de telefonía móvil 'en competencia y que el público acepta, puesto que sigue consumiendo' el servicio.
No obstante, el secretario de Estado advirtió de que el Gobierno va a poner en marcha un sistema de medición de la calidad del servicio en la telefonía móvil para que las operadoras queden 'retratadas de una manera contundente' ante los usuarios.
Este sistema, que ya existe para la telefonía fija y el cable, se basará en datos que proporcionarán las propias operadoras y que posteriormente serán auditados y publicados periódicamente.
Las nuevas tarifas de Telefónica, 'sin sorpresas'
Francisco Ros hizo estas declaraciones durante y después de su comparecencia ante el Senado, pero no desveló cuáles van a ser los nuevos precios máximos de Telefónica para el año que viene. El conocido como price cap está siendo discutido en estos momentos entre los Ministerios de Industria y Economía y, aunque tiene que entrar en vigor el 1 de enero, todavía no se ha establecido.El secretario de Estado adelantó que el price cap para 2005 'no traerá sorpresas' y que se mantendrá en la línea de los últimos años. En este ejercicio, la reducción de precios de Telefónica forzada por el Gobierno ha sido del 2%.El sistema de precios máximos no durará todo el año, sino que desaparecerá cuando la CMT termine su análisis de los diferentes mercados y defina cuáles necesitan intervención en precios.Ros también explicó que el Gobierno aprobará en el plazo de seis a ocho semanas dos de los reglamentos que desarrollan la Ley General de Telecomunicaciones. Serán el del servicio universal y el de derechos de los usuarios.