Los híper son los establecimientos con menores diferencias de precios
Los hipermercados o grandes superficies comerciales son los establecimientos donde los intervalos de precios entre los más caros y los de precio más bajo son menores. æpermil;sta es una de las conclusiones que arroja el estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid sobre 'Niveles de precios de productos de gran consumo', que fue presentado ayer por la Secretaría de Estado de Turismo y Comercio.
Atendiendo a la clasificación por los cinco tipos de productos analizados (frutas y verduras, pescadería, carne, droguería y alimentación envasada), los intervalos de precios son muy elevados en los productos frescos, en especial en las frutas donde alcanzan el 25,6% de promedio, y pescados, con un 21,1% de diferencia; mientras que son bastante reducidos en alimentación envasada y droguería (del 7,7% y el 9,1% respectivamente).
En frutas y verduras, que registraron un crecimiento en julio pasado sobre el mismo mes de 2003 del 0,6%, los comercios con los precios más bajos son las fruterías, mientras los de costes más altos son los grandes supermercados y los mercados municipales. La dispersión por tipología de comercios se sitúa en un promedio del 8%.
Para el pescado fresco, son los supermercados en cualquiera de sus tamaños y los híper los que ofrecen niveles de precios más bajos, un resultado que, según revela el estudio, se mantiene constante desde hace un año, fecha en la que comenzó la recogida de datos. Así, la diferencia se mantiene en torno al 13%. En el caso de la carne, los supermercados pequeños son los que presentan los precios más bajos, seguidos de los mercados municipales, encontrando los costes más elevados en los 'híper' y supermercados grandes, aunque el informe pone de manifiesto que las diferencias se han atenuado con respecto a muestras anteriores hasta alcanzar un modesto 4%.
Por último, tanto en el caso de los productos de droguería e higiene personal, como en los de alimentación envasada, las diferencias de precios son sensiblemente menores y aumentan a medida que disminuye el tamaño del establecimiento.
El análisis por ciudades demuestra que los precios más altos se encuentran en las insulares y en las de mayor nivel de renta, así como en las de más incidencia turística.