Ibercaja se marca el objetivo de elevar un 65% el negocio en 2007
Ibercaja ha lanzado un ambicioso plan para aumentar un 65% el volumen de negocio en tres años y captar 500.000 clientes. Con este avance, la entidad espera subir un puesto y convertirse en la sexta caja, por encima de la CAM.
La caja aragonesa quiere llegar a ser la sexta caja española por activos, por encima de la CAM. Es una de las metas deseadas, como confirmó ayer el director general José Luis Aguirre. Para crecer, se ha marcado un ambicioso plan estratégico para cumplirlo en 2007. Los objetivos se basan en la expansión y un mayor ritmo en el negocio.
El presidente de la entidad, Amado Franco, explicó ayer que la caja quiere abrir 150 nuevas oficinas en toda España lo que le permitirá estar presente en todas las poblaciones de más de 100.000 habitantes de todas las comunidades autónomas, incluido el País Vasco, donde la caja no tiene sucursales.
La entidad quiere incrementar su liderazgo en Zaragoza y Aragón, La Rioja y Guadalajara, afianzarse como la tercera caja de la Comunidad de Madrid -donde se produjo la primera expansión de la entidad, iniciada a finales de los ochenta- y tener más presencia en el Arco Mediterráneo y Andalucía.
Este crecimiento territorial le permitirá pasar de las 939 oficinas actuales a 1.089 en el año 2007, un 16% más, y de una plantilla de 4.100 trabajadores a 4.600, un 14% más.
En cuanto a la actividad, la caja prevé aumentar un 65% el volumen de negocio, hasta 72.000 millones de euros, frente a los 43.000 millones de este año. El 60% del crecimiento corresponderá a recursos captados y el resto a créditos, con las hipotecas como motor preferente, aunque el ritmo de crecimiento irá moderándose.
Esta evolución será posible con la captación de 500.000 nuevos clientes en este periodo, lo que supone un alza del 22%, ya que ahora cuenta con 2,3 millones. Además, creará quinientos puestos de trabajo, con lo que la plantilla alcanzará los 4.580 trabajadores.
æpermil;stas son las prioridades del nuevo plan estratégico que presentaron ayer ante la asamblea de la entidad el presidente y el director general de Ibercaja, Amado Franco y José Luis Aguirre, respectivamente.
Amado Franco señaló que se trata de 'renovar la apuesta por el crecimiento equilibrado y rentable, consolidar la dimensión nacional y reiterar el compromiso social de la caja, tanto en la actividad financiera como a través de la obra social y cultural'. Ibercaja ganó 117 millones hasta octubre, un 4,9% más que un año antes y prevé cerrar este año con alza similar.